Las entidades sociales prevén un otoño “duro” por el aumento de la inflación. Los Bancos de Alimentos de la Comunitat Valenciana, presentes en las tres provincias, reconocen a Onda Cero, aunque con matices, que está habiendo un aumento de la demanda, sobre todo entre los jóvenes. En cuanto al almacenaje de alimentos, apuntan que, en general, "está garantizado" para estos próximos meses, pero ponen el foco en algunos alimentos muy concretos, como el aceite y la leche, en los que puede haber "problemas" por la escalada de los precios.
El presidente del Banco de Alimentos de Castellón, Santiago Miralles, apunta que el precio del aceite de oliva, que ha llegado a los 4 euros, "es prohibitivo". En cuanto a la leche, destaca, "ha subido 30 céntimos". "Una exageración", alerta.
Por su parte, al presidente del Banco de Alimentos de Alicante, Juan Vicente Peral, le preocupan los "recortes" por parte de los Fondos FEAD de la Unión Europea, programa que, según explica, sustenta gran parte de su actividad.
Peral ha puesto el foco este martes en la leche y explica que para 2023 "no está garantizado todavía" que esté incluida en el reparto de esos fondos europeos. "En Alicante", apunta el presidente del Banco de Alimentos, "estamos entregando al año un millón de litros de leche y con los recursos propios, siendo muy optimista, no llegaríamos ni al 10% de lo que venimos repartiendo con la Unión Europea".
Desde el Banco de Alimentos de Valencia, su presidente, Jaime Serra, apunta que, en cuanto a la demanda social, solo este martes se han registrado 50 familias que hasta ahora, empezado ya el mes de septiembre, "no habían acudido en busca de ayuda". "Esto, lamentablemente, ocurre a diario. No sé que va a pasar a final de año, porque el tema empieza a ser preocupante", reconoce Serra.
Los tres Bancos de Alimentos de la Comunitat Valenciana coinciden en que necesitan "más apoyo institucional" para hacer frente a los meses que vienen y a las necesidades de las familias que atienden a diario.
