Hoy con Leleman venia pensando en… los viajecitos de Anil Murthy a Singapur. Que según el club era algo que ya estaba previsto en el guión para explicarle a Peter en que consiste lo del fondo CVC.
Y yo pienso en lo que Anil no le dirá a Peter. No le dirá que el valencianismo está en armas contra él, contra su manera de gestionar el club, contra sus continuos desaires a la afición, contra unas cuentas dramáticas que cada año que pasa hacen más pequeño al Valencia y a su inversión. No le dirá Murthy a Peter que Joey Lim hizo un bailecito desafiando y burlándose de esos aficionados que se metieron kilómetros y kilómetros a la espalda para poder estar en Anoeta. Tampoco le dirá Murthy a Peter que el día 11 hay prevista una marcha de miles y miles de valencianistas para protestar contra la propiedad y la gestión de esos compatriotas que tiene aquí en Valencia viviendo a cuerpo de Rey.
No le dirá Anil a Peter que ya nadie aquí en Valencia cree en él, ni siquiera las instituciones que insisten una y otra vez en ver pruebas de su intención, si es que la hay, de acabar el nuevo Mestalla. No le dirá Murthy a Peter que la sociedad valenciana ha dicho basta y que la única salida es la venta de su paquete accionarial. Nada de esto le dirá.
Tal vez le intente convencer de lo bien que está gestionando su propiedad, de que la llegada de Bordalás va a devolver al Valencia a la Champions y dejará de tener que hacer ampliaciones de capital para equilibrar las cuentas. Tal vez le intente convencer de que los que protestan son cuatro violentos o, término acuñado por él mismo, “falsos valencianistas”. Tal vez le diga que aquí todo está en órden y no hay de que preocuparse.
Pero si Peter conoce a Murthy, al presidente en el que ha dejado en manos su inversión… sabrá o debería saber que… ese presidente… no le dice la verdad ni al médico…