Elche, Crevillent y Santa Pola generan empleo en el último año pero reducen la calidad del mismo
La creacion de empleo afecta sobre todo a trabajadores de entre 25 y 44 años; más a hombres que a mujeres; y la temporalidad ronda el 87%
El desempleo ha descendido en Elche, Crevillent y Santa Pola en el último año natural, si bien la temporalidad del empleo creado, que es la principal característica del mercado laboral en la comarca, se ha consolidado en ese mismo periodo en índices que se aproximan o superan al 87%, lo que muestran perfectamente la precariedad de una situación presente que de manera irremediable prolonga sus efectos negativos al futuro.
El análisis de la evolución del paro entre agosto del paso año y ese mismo mes de este año revela que en Elche el número de parados ha descendido en 1.451 personas, liderando la creación de empleo el sector de la Industria, seguido del de Servicios y del de la Construcción.
Por sexo, en el último año se ha creado más trabajo en Elche en los hombres que en las mujeres y por grupo de edad el más beneficiado por esa tendencia de creación de puestos de trabajo han sido los trabajadores de entre 25 y 44 años de edad, grupo en el que se han creado 828 empleos, seguido de los mayores de 44 años, colectivo en el que se han registrado 580 nuevos puestos de trabajo.
La situación contrasta con los índices de contratación temporal que pese a haber descendido en el último año continúan en el entorno del 88% en la ciudad, debilitando con ello el mercado laboral con contratos que en muchos casos, según insisten los sindicatos, son de apenas unas horas.
En Crevillent y Santa Pola la tónica es prácticamente idéntica, tanto desde la perspectiva del empleo como del de la contratación.
En Crevillent en los últimos doce meses se ha reducido el empleo en 170 personas, mientras que el índice de contratación temporal a día de hoy en la localidad se cifra en el 81%.
En Santa Pola, en el último año natural se han creado 84 empleos y su índice de temporalidad en la contratación es del 89%.
Con todo, en el último año se ha registrado más empleo pero de menos calidad, con las consecuencias negativas que esa situación tiene a medio y largo plazo.