El principal problema con el que se encuentra este colectivo es el legislativo. El último modelo de inserción laboral para personas con discapacidad intelectual en Cataluña fecha de los años 90. El director del Dincat, representante del sector de discapacidades intelectuales, Victos Galmés, ha explicado a Onda Cero que "a pesar de su antigüedad, el modelo tuvo mucho éxito ya que un 27% de las personas con este tipo de discapacidades que trabajan en España lo hacen en Cataluña".
Pero para acceder al mercado laboral, es necesario formar-se profesionalmente. Y es que para este colectivo, lo más complicado es poder insertar-se dentro de las empresas ordinarias, puesto que las ofertas formativas post obligatorias son prácticamente inexistentes.
"Menos de un 10% de las personas con discapacidades intelectuales cusas este tipo de formaciones", indica Galmés. Además, desde Dincat piden a las administraciones estrategias integrales que incluyan, entre otras, un nuevo modelo de inserción laboral que cuente con el acompañamiento laboral.
Lo he conseguido
Sergi Moncunill es un joven de 34 años nacido en Valls, Tarragona. Antes de que acabe el año empezará un nuevo trabajo. De hecho, su primer trabajo en una empresa ordinaria. Después de pasar un proceso muy complicado y aprobar las oposiciones hará tareas administrativas en el departamento de Hacienda de Tarragona. Y lo ha conseguido tras casi 20 años luchando por su sueño: Poder trabajar como cualquier otra persona.
El hecho de tener una discapacidad intelectual de un 65% le ha cerrado muchas puertas. Desde el centro especial de trabajo le han dado la oportunidad de obtener un trabajo remunerado con fines sociales. Ahora bien, siempre ha tenido problemas para insertarse dentro del mundo laboral. El propio Sergi nos ha explicado cuál es la barrera que los separa de conseguir sus sueños.
"Nos dicen que no podemos, que no tenemos la capacidad para hacer lo que ellos hacen... Y esto es mentira", asegura Sergi. Desde el 2019 que estudia, trabaja y mantiene su casa, siempre con el apoyo del centro y la familia. Tres años llenos de sacrificio que han dado sus frutos. Pero el camino ha sido complicado y no siempre ha podido mantener la esperanza intacta.
"Hay momentos frustrantes, parece que nunca saldrás de este agujero". Pero Sergi nunca se rindió y, para él, ahora lo más importante es que sus compañeros del centro puedan alcanzar sus sueños...