El 30º Congreso Nacional de ERC ha avalado este sábado las ponencias política y estatutaria promovidas por la nueva dirección que preside Oriol Junqueras, después de que los dos sectores de oposición interna se hayan desinflado en las últimas semanas y no hayan podido presentar batalla.
El hecho de que el pasado diciembre Junqueras necesitara una segunda vuelta para imponerse con el 52% de los votos a su rival alternativo a la presidencia de ERC, Xavier Godàs, hacía pensar que el cónclave de este fin de semana podía convertirse en un segundo 'round' de las hostilidades internas en el partido.
Sin embargo, la primera jornada del congreso que se celebra en el recinto de Ca n'Oliveres de Martorell (Barcelona) ha sido un plácido trámite para la nueva dirección encabezada por Junqueras, que ha visto aprobadas sus ponencias política y estatutaria con cerca del 90% de los apoyos de los congresistas.
Una de las claves que podría explicar este porcentaje tan abrumadoramente favorable a Junqueras radica en la cifra de asistentes al cónclave: de los 1.524 militantes que podían participar, han acudido unos 800, y fuentes de diferentes sectores del partido confirman que las filas de los críticos están desmovilizadas.
La desactivación de las tensiones internas ya se hizo patente cuando el pasado miércoles el sector de Xavier Godàs anunció la retirada de la enmienda que pretendía delimitar el mandato de los dirigentes del partido para que Junqueras no pudiera optar a la reelección del cargo.
Un texto con más de 800 enmiendas
El texto, que recibió 867 enmiendas, pero solo cinco han llegado vivas al plenario, no plantea un cambio de rumbo significativo ni determina la política de alianzas del partido, pero sí que pone en valor los "acuerdos ambiciosos" suscritos con los socialistas y subraya que la "coyuntura de debilidad" del Gobierno de Pedro Sánchez es una "oportunidad para conseguir el cumplimiento" de los pactos.
De entre las enmiendas transaccionadas, destaca una del colectivo Àgora Republicana, encabezado por el exportavoz de ERC en el Congreso, Joan Tardà, sobre la "resolución del conflicto nacional". En esta enmienda se deja constancia de que ERC aboga por una resolución "basada en el principio democrático" y apuesta por mantener "una relación con el socialismo catalán que combine confrontación y colaboración".
En esta línea, la enmienda pactada llama a "impulsar conjuntamente la Convención Nacional para la Resolución del Conflicto Nacional, enmarcada en el pacto de investidura del presidente de la Generalitat". Asimismo, insta a las fuerzas independentistas y soberanistas de izquierda "a fomentar sinergias y alianzas con el fin de construir una vía amplia que permitan mejorar las condiciones para hacer efectivo el derecho a decidir".
El plenario también ha escuchado el informe de la comisión de seguimiento de pactos, en cuyo nombre ha hablado el director general de ERC, Lluís Salvadó, que ha hecho una valoración "moderadamente positiva" del estado de cumplimiento actual de los acuerdos suscritos con los socialistas.
Conclusiones de la "Comisión de la verdad"
Por otra parte, la 'Comisión de la verdad' -creada por la nueva dirección de ERC y liderada por Joan Tardà- para investigar el caso de los carteles denigratorios de los hermanos Maragall ha señalado como responsables a dos exdirigentes del partido, Sergi Sabrià y Marc Colomer, y se ha disculpado por los hechos.
Mañana domingo se votará la ponencia estratégica y el congreso se cerrará al mediodía con un acto político protagonizado por Junqueras y la secretaria general de ERC, Elisenda Alamany.
