El ayuntamiento de Valladolid quiere dejar zanjado el problema de la sede de Pingüinos antes de que termine la legislatura. Todos los grupos políticos han apoyado una moción para que se mantenga la apuesta por la ubicación en la Hípica durante el próximo mandato. Eso sí, tanto el PSOE como IU han puesto dos condiciones: que se demuestre y justifique la legalidad del terreno y también que es el más idóneo para albergar cita. El alcalde, Javier León de la Riva, ha dado la bienvenida al cambio de parecer de Izquierda Unida, pero le ha pedido que tenga capacidad decisoria y no remita su voto a la decisión de asambleas. Insistía en la idea la concejala de turismo, quien le pedía a Izquierda Unida que convenciera a ‘los amigos de sus amigos’ sobre la legalidad de los terrenos.
En breve se convocará una reunión para intentar avanzar en este acuerdo. A la espera de conocer la propuesta al detalle, el club organizador de Pingüinos, Turismoto, considera que se ha dado un paso importante a favor de la concentración.
Control de los contratos menores
El consenso se terminaba en este punto del orden del día, y la oposición no conseguía sacar adelante sus propuestas para reforzar el control y garantizar la transparencia en los contratos menores tras el Caso Samaniego. Sin embargo, en la rueda de prensa posterior al pleno, el alcalde no ha descartado implantar si repite cargo un sistema de control aleatorio de facturas.
