La situación actual hacía imposible una celebración como habitualmente se venía haciendo, por ello, cumpliendo con todos los protocolos sanitarios, este sábado se ha desarrollado un cortejo reducido en número de alcaldes, de vecinos y vecinas, de coros y danzas, de municipios de la comarca y de visitantes; aunque ha servido como símbolo de lo que es esta fiesta ancestral, de Interés Turístico Nacional.
La alcaldesa Tita García Élez, acompañada por el vicario episcopal, Don Felipe García, ha recibido en el altar del templo eclesiástico las ofrendas que se han ido sucediendo por el pasillo central. Tras los maceros, han desfilado con sus ‘mondas’ las asociaciones de vecinos ‘Ruiz de Luna’, Puerta de Zamora, El Carmen, 8 de Septiembre, Santa María, Las Moreras, La Milagrosa y Fray Hernando.
Solo tres pueblos, además de Gamonal, han participado en la ofrenda, siendo éstos algunos de los que históricamente han sido especialmente simbólicos desde sus orígenes más recientes. El primero en entrar ha sido Pepino, con su alcalde, Inocencio Gil, y sus quintos. Después, 4 usuarios de la Asociación Atanjo han portado las andas del exorno floral con motivos icónicos de la Virgen del Prado.
A continuación, ha hecho su ofrenda el municipio de Segurilla, con su alcalde, Pablo Barroso, también con la tradición de sus quintos. Luego han sido otros 4 usuarios, esta vez de Down Talavera, los que han portado otra de las andas de flores típicas de las Mondas. Después ha hecho acto de presencia la localidad de Mejorada, con su primer edil, José Carlos Sánchez, y también sus quintos y tradicionales vestimentas.
Uno de los momentos más simbólicos, como cada año, lo ha protagonizado Gamonal, Su alcaldesa, Marta Garrido, ha sido recibida por la regidora talaverana para intercambiarse los bastones. Tras ellas, se han escuchado los pasos solemnes de la Soldadesca y su tradicional reverencia a la Virgen del Prado. Han cerrado esta reducida ofrenda dos protagonistas indiscutibles, los dos carneros de Gamonal, únicos animales que entran en la Basílica de Nuestra Señora del Prado. Tirando del carrito, adornado con flores y las artesanales banderitas, ‘Pajarito’ y ‘Mueso’ han sido conducidos por sus cuidadores, los hermanos Joaquín y Jesús Gómez Martín, ante la verja del altar de la Virgen.
