Se ha reconocido a los seis presidentes de la Diputación durante esta etapa. Cada uno de ellos, junto a todos los diputados o familiares, han recibido una réplica de la fachada del Palacio Provincial de Ciudad Real.
En el acto ha estado el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien ha destacado que este reconocimiento a la labor municipal es un reconocimiento a la política en estado puro.
Ha subrayado el papel que han jugado las diputaciones para consolidar la democracia, ha defendido la vigencia de estas instituciones y ha recordado que la administración provincial no fue la culpable de la crisis económica.
En este sentido, García-Page ha indicado que las diputaciones fueron las primeras instituciones que se pusieron al día y ha destacado la situación económica de la de Ciudad Real, que mantiene deuda cero.
Por su parte, el presidente de la Diputación, José Manuel Caballero, ha valorado el trabajo que han realizado todos los diputados durante la época democrática.
También ha defendido la continuidad de esta administración porque es de utilidad para los municipios y trabaja para lograr la igualdad, el empleo y el desarrollo de la provincia.
Y todo ello, ha dicho Caballero, se ha logrado con una gestión limpia, honrada y eficaz en estos últimos 40 años.
Mientras, la alcaldesa de Ciudad Real, Pilar Zamora, ha reconocido el trabajo de los diputados provinciales y ha manifestado su admiración y respeto hacia ellos.
Zamora ha destacado el trabajo que la Diputación ha desarrollado por todos los municipios, especialmente los más pequeños.