El Plan de Concordia que el Gobierno aragonés presentará en julio para sustituir a la ley de memoria democrática continúa suscitando críticas de las asociaciones memorialistas. Lamentan que el texto, que ya se ha filtrado a la prensa, no incluya ninguna referencia explícita al franquismo. La consejera de Presidencia, Tomasa Hernández, ha explicado este lunes que el plan habla de “dictaduras” de manera genérica porque todo el mundo sabe a cuál se refiere.
"No ha habido tantas dictaduras en España como para no entender a qué nos referimos. Evidentemente, la época en la que estuvo gobernando Francisco Franco fue una dictadura. Lo dicen los manuales de historia y no tiene por qué decirlo un plan de concordia", ha añadido.
Fernández afirma que quieren "dignificar" a las víctimas, pero no imponer una ideología. Por eso, aunque el texto sí hace referencia al terrorismo y especifica las muertes causadas por ETA, en ningún momento se habla de víctimas del franquismo o de la Guerra Civil. Asegura que no se trata de una imposición de sus socios de Vox, que ya han visto el documento, sino de evitar los errores en los que incurría la ley de memoria.