Rafael Feliz habla en el comentario de esta semana de cómo han quedado los clubes aragoneses tras el cierre del mercado y no ve un gran futuro con los nuevos que han llegado, tanto al Real Zaragoza, que piensa que se ha debilitado, como a la Sociedad Deportiva Huesca. Queda tiempo por delante para sacar la actual situación que están atravesando, que sigue siendo muy complicada.
Mientras que en baloncesto, con la situación que está viviendo el Casademont Zaragoza con cambios de jugadores que han aportado muy poco al equipo, está claro que el problema lo tienen en el banquillo, pero con un contrato de larga duración y los problemas económicos es difícil de solventar.