El detenido, que se ha acogido a su derecho a no declarar, está siendo investigado por un delito de asesinato con alevosía. La juez, que ha levantado el secreto del sumario, ha acordado también la prohibición de comunicarse por cualquier medio con los padres y hermanas de la víctima.
Asimismo, ha decretado la suspensión de la patria potestad de su hijo, de tal manera que se suspenden las visitas y cualquier otro derecho inherente a dicha patria potestad. La juez ha acordado, en este sentido, otorgar la guardia y custodia del menor a los abuelos maternos.
Por último, la juez se inhibirá al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Osuna, ya que al tratarse de una causa de Violencia de Género debe tramitarse en el partido judicial donde residía la víctima.
Rocío Caíz Pozo fue asesinada y descuartizada. Su exnovio y padre de su bebé de 4 meses, Adrián Negrut, confesaba hace unos días el crimen. La descuartizó y metió los restos en bolsas que luego tiró por varias zonas de campo de Estepa. Rocío desaparecía el pasado miércoles 2 de junio en Martín de la Jara. Había ido hasta Estepa para ver a su ex novio. La familia siempre lo había señalado y lo acusaban también de malos tratos. La familia siempre dijo que la desaparición era muy extraña y negaron que se hubiera marchado voluntariamente. Tampoco creyeron que ella fuese quién habría escrito el mensaje en el que decía que se había ido a Badajoz con un chico que había conocido. Un mensaje que escribió el asesino que durante todos estos días aseguraba que la joven había dormido en su casa y que cuando se despertó ya no estaba con él. En ese momento llamó a su madre para decirle que Rocío se había ido. Tenía solo 17 años…
