De las investigaciones policiales se pudo comprobar que las personas que regentaban el piso eran los integrantes de un clan familiar entre los que se hallaba un menor de edad.
Los investigadores dentro de las vigilancias pudieron observar que este clan familiar compuesto por tío, sobrino y hermana, vendían sustancias estupefacientes a menores edad, e incluso a menores de 14 años, sin embargo no tenían antecedentes relacionados con el tráfico de drogas.
El pasado día 16 de diciembre, se procedió a la entrada y registro del domicilio y se incautaron 136 plantas de marihuana, 80 gramos de hachís y 8 gramos de cocaína, además de útiles para el corte, pesaje y distribución de la droga. También fueron intervenidos focos, filtros y tubos relacionados con la plantación de marihuana.
Con esta actuación se da por desmantelado un punto de droga en la barriada de San Pablo, que a consecuencia de la venta de droga a menores había creado en la barriada una sensación de inseguridad. El cabecilla del clan tenía antecedentes policiales por riña tumultuaria.