Después de un buen resultado, el técnico madrileño intenta "mantener a los jugadores dentro de un equilibrio emocional, pero sabiendo que aún nos conocemos muy poco. Esperemos hacer un buen partido en un estadio donde no tenemos buenos recuerdos en general como sevillistas, así que a ver si podemos cambiar eso también. Hay que ser positivo sin pensar en el pasado porque no nos ayuda y a tratar de jugar ante un equipo que se conoce desde hace doce años. Va a ser una prueba importante". Tras la victoria en Los Carmenes decía Quique: "Es que estos jugadores son muy buenos". Entiende que, al margen de cuestiones tácticas, había que tocar las emocionales. "Confío mucho en la capacidad de los futbolistas. Tienen que ir cambiando el gesto, comportamiento y confianza. Sé que va a suceder, no sé en qué plazo, pero ya ha empezado. Se trata de llegar a estar muy bien y ya estamos algo mejor", declaró.
El Sevilla recupera a Sow, que se perdió el encuentro de Granada por molestias en el tendón de Aquiles, y a Rakitic, tras cumplir sanción. Hasta diez jugadores siguen en la enfermería y se pierden lo del Metropolitano: Nyland, Acuña, Fernando, Navas, Badé, Nianzou, Joan Jordán, Lukébakio, Lamela y Mariano. Quique se ha llevado a canteranos como Alberto Flores, Matías, Darío, Manu Bueno, Lulo e Ibra. Les acompañan en la convocatoria Dmitrovic, Alberto Flores, Juanlu, Gattoni, Gudelj, Marcao, Ramos, Kike Salas, Pedrosa, Soumaré, Sow, Rakitic, Óliver Torres, Suso, Ocampos, Januzaj, En-Nesyri y Rafa Mir.