Nada más pitar el árbitro aparecieron las lágrimas en los ojos de un Héctor Bellerín que parece haber jugado de verdiblanco desde pequeño. Y de algún modo fue algo así, porque su padre, bético de cuna, siempre le habló del Real Betis y el jugador barcelonés cumplió un sueño el día en que pudo firmar por el Betis cedido desde el Arsenal. En las celebraciones del título de copa fue uno de los que más disfrutó y, aunque su ilusión es quedarse, sabe que economicamente no sería viable para el club heliopolitano y ayer rompió a llorar pensando en que no volvería a ese cesped. Una hora más tarde, con el estadio vacío, aún no habia salido del verde. Sentado en la hierba, mirando a cada rincón del Villamarín, luego abrazado por su padre... fueron momentos muy emotivos para el lateral catalán. Su compañero Borja Iglesias, entre bromas, proponía en Twitter hacer un crowfunding para que se pudiera quedar en el Betis.
También fue bonita la despedida a Joel Robles. En el segundo gol, Juanmi sacó la camiseta del portero madrileño y la de Tello, a modo de despedida. El cancerbero salió al centro del campo tras el partido para aplaudir a una afición que coreó con cariño su nombre. No apareció Tello, que tras el encuentro se marchó al vestuario y que hoy publicaba una nota en la que afrimaba estar "muy triste y decepcionado por no poder despedirme de todos vosotros dentro del terreno de juego, de vivir ese ambiente único una última vez desde dentro vistiendo la camiseta de las trece barras, pero me quedará el haber vivido tantos momentos y el haber disfrutado tanto en el Benito Villamarín con todos vosotros. Gracias por la afición que sois, os merecéis todo lo vivido este último año. Me voy orgulloso de haber formado parte de este equipo y sobre todo de esta familia".
Y otro que puede haber jugado su último partido "al final de la palmera" es Guido Rodríguez. Está encantado en el Betis pero sabe que hay clubes de mucho nivel pujando por él. Y el club sabe que tiene que hacer este verano una buena venta para cuadrar números. Por eso, el argentino declaraba que "no puedo prometer nada. Siempre soy muy franco y hablo con la verdad. Yo tengo dos años más de contrato, estoy muy feliz y contento.Tengo la cabeza puesta en el club, en el equipo pero yo no soy el único que decide y el mercado se mueve.No puedo prometer nada porque no lo sé. Lo que le puedo decir a la gente es que estoy muy feliz, disfrutando de Sevilla y del equipo. Estoy muy contento aquí y no tengo apuro de hacer nada raro".