El Villarreal CF ha obtenido la victoria este domingo a costa de un cándido Granada (1-3) sin necesidad de forzar la maquinaria, y aprovechando los fallos defensivos que acumuló el conjunto nazarí en los primeros minutos del segundo periodo, para romper la racha de doce salidas consecutivas sin ganar, con un balance de nueve empates y tres derrotas, lejos de El Madrigal.
A Marcelino García Toral, que cumplía su último partido de sanción tras la expulsión en la primera jornada contra el Real Betis, no le faltó razón cuando aventuró en la previa que se trataría de un partido "plomizo" y "poco vistoso". El conjunto nazarí arrancó con una buena defensa en su feudo, se mostró compacto para desmontar la circulación del Villarreal y solo falló en donde se marcan las diferencias, el área contraria.
La imprecisión en los metros finales marcó la orden del día en Los Cármenes. Ni Villarreal, que llevó el peso del partido, ni Granada, que se tuvo que reponer de la lesión muscular de su mediocampista Rubén Pérez, aprovecharon el desorden que había en el centro del campo para asestar un golpe letal antes de irse al descanso.
Toda la solidez con la que se plantaron los nazaríes en el primer periodo la perdieron en cuestión de instantes en la reanudación. Un arreón del 'Submarino amarillo' tumbó a su rival en cuestión de minutos. Manu Trigueros aprovechó un mal pase del guardameta Andrés Fernández para abrir el candado y Cédric Bakambu, única novedad del conjunto 'Groguet' en detrimento de Leo Baptistao, amplió la cuenta para firmar su tercera diana de la temporada.
Se durmió el Villarreal, conformista con la renta, y acabó sufriendo. Los de José Ramón Sandoval recortaron diferencias por medio de Fran Rico, que cazó un rechace en la frontal, y sucumbió en los minutos finales, con un Denís Suárez -debutante, al igual que Adrián López- que explotó los espacios para que Samuel García se estrenara como goleador 'groguet' marcando el tercero.
