CASO RUBIALES

Misterchip, sobre la estructura del deporte español: "Con el fin de Rubiales no basta. Francos tiene que coger el toro por los cuernos"

Alexis Martín Tamayo considera que es el momento de que el CSD cree una estructura competente y limpia en todas las federaciones deportivas de España porque si tras la salida de Rubiales no se produce ese cambio, de nada habrá servido

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ondacero.es

Madrid | 11.09.2023 20:21

Ha llegado la dimisión de Luis Rubiales. Ya no es presidente de la Real Federación Española. Ya no está ese peligro de que acabe la inhabilitación de FIFA y que ante la inanición de los organismos españoles que podían inhabilitarle de que volviera a la presidencia, ese riesgo ha desaparecido porque Luis Rubiales ha tenido más conciencia que el propio TAD y lo que no fue capaz de hacer lo ha hecho el propio Rubiales, dimitir. La dimisión, evidentemente, llega muy tarde, además, la entrevista en la que dimite se la ofrece a un periodista que, en fin, de un currículum cuanto menos curioso. Quien quiera que lo que lo investigue un poco.

Y yo quería este vídeo porque ya hemos hablado mucho de Rubiales y de toda su gestión yo quería en este vídeo recordar algo que pasó hace poco más de un año en este país. Fue el momento en el que estaban los audios de Rubiales por todas partes en los que se veía sus negociaciones con Gerard Piqué, en los que se veía cómo gestionaba el tema de la Supercopa, el tema de su apartamento, cosas que hemos denunciado durante muchos años en Ondacero. Rubiales entendió que era un buen momento para hacerse su típica tourné por las por las radios, por las diferentes emisoras y a todos su jefe de prensa nos llamó y nos dijo oye, que Luis Rubiales está dispuesto para hablar, no hay nada que ocultar, está todo clarísimo y queremos aparecer por vuestras radios y responder a las preguntas que queráis, claro. Esa era la trampa.

Rubiales, cuando va a una radio, no va a responder preguntas. Cuando va a una radio va a vendernos su propaganda y como en la mayoría de las emisoras se lo compran, Rubiales se siente plenipotenciario y se siente campeón cada vez que va a una radio. Entonces con ese espíritu apareció en Onda Cero, como digo hace poco más de un año, con el cronómetro en mano, eso sí, su jefe de prensa tenía el cronómetro en mano, un cronómetro que sólo activaría en caso de que la cosa se pusiera fea. Y la cosa se puso fea. Evidentemente se puso fea porque esta fue la única emisora en la que no se le permitió que vendiera su propaganda. Esta fue la única emisora en la que se le hicieron preguntas que él no quería responder y se le instó a que las respondiera, no dejándole que nos vendiera su propaganda, que es lo que hizo en el resto de radios que oye, cada uno puede hacer lo que le dé la gana.

Todo el mundo es libre en sus programas, puede hacer lo que le parezca bien, pero pasa que mucha de esa gente ahora está al frente de la manifestación y está bien que la gente cambie de opinión. Lo que hacía Rubiales en un momento te puede parecer bien y ahora te puede parecer mal. Eso está perfecto. Lo que ya no queda también es que ahora, después de todo lo que ha pasado, después de la perspectiva del tiempo, después de esa tourné que hizo en su momento Rubiales por la radios, después de las entrevistas que ha concedido muchas a muchos medios, a Onda Cero no ha vuelto. Después de aquella noche no volvió. Evidentemente ya se dio cuenta que aquí cualquier cosa menos jabón.

Bueno, pues después de eso, decir ahora que le están echando, pero que ya le tenían que haber echado hace mucho tiempo por todas las fechorías que había cometido. En fin, no tengas jeta. No, no tengas jeta, ahórrate eso, esa parte del discurso, ahórratela porque has hecho lo mismo que hace una semana o dos semanas hicieron en la asamblea. Has estado aplaudiendo a Rubiales, has estado aplaudiendo o guardando silencio, un silencio cómplice de todas esas fechorías, de todas esas cosas que ha hecho Rubiales y que ahora te parecen que debieran haber sido sancionadas antes. Pues no tengas jeta, cállate esa parte, guárdatela, quédate con lo último que ha pasado e intenta correr un tupido velo sobre lo anterior, porque ahí no hay defensa, ahí no hay defensa. Ahí se le vio a todo el mundo el plumero, a todos.

Le quiero agradecer especialmente a mi compañero Rafa Fernández, que ha sido el que ha peleado más contra Luis Rubiales, el que ha destapado todos sus escándalos, el que no se ha dejado en ningún momento amedrentar, que estaba a mi lado aquel día en la entrevista que junto conmigo no le permitió ni un solo minuto de propaganda. Que le instamos al señor Rubiales a que nos respondiera a las preguntas y cuando vimos que no las quería hacer, insisto, no le dejábamos que nos vendiera su discurso. Ahí fue cuando el jefe de prensa empezó a gesticular, empezó a saltar con el cronómetro, a vociferar por ahí detrás dio un espectáculo de un espectáculo lamentable. Claro, la cosa no era como ellos pensaban y evidentemente había que cortar la entrevista como fuera y la entrevista se cortó y no pasa nada y todo el mundo vio lo que sucedió.

Y ahora, con el paso del tiempo, pues creo que más de uno entenderá lo que aquel día. Tanto Rafa Fernández como yo hicimos. Recuerdo como anécdota que al final se despidió Rubiales y se me acercó Rubiales. Me dio la mano. Le di la mano, por supuesto, y me dijo algo así como chico, tú no me conoces, chico. Me dijo chico a mí, que tengo como cinco o seis años más que él. Bueno, ese es el talante de Rubiales, el talante chulesco, un talante prepotente, un talante de mirar a todo el mundo por encima del hombro. Todos somos chicos, todos somos novatos. Esa es un poco su forma de actuar. Bueno, lo otro que quería comentar de este asunto es que espero que la destitución de Rubiales sirva para algo que sirva para modernizar las estructuras del deporte español, para limpiarles un poquito el polvo que yo creo que están ya bastante pasaditas, y que si no nos preocupamos de ello, se nos van a acabar derrumbando del todo. El deporte español tiene mugre, pero hasta arriba, hasta arriba, porque el sistema en el que se basa la Federación Española de Fútbol es exactamente el mismo en el que se basan el resto de federaciones deportivas.

Esto que pasa en el fútbol y que tanto nos escandaliza, nos escandaliza porque se conoce, porque el fútbol es un deporte muy mediático, es el deporte número uno en España y evidentemente todo lo que tiene que ver con el fútbol se entera todo el mundo. Sin embargo, hay otros deportes, otra federaciones, en las que ocurren cosas muy parecidas o similares y de las que no tenemos conciencia porque, bueno, son deportes como piragüismo, balonmano, gimnasia.

Cada cuatro años nos preocupamos un poquito por por ellos algunos. Insisto, mi compañero Rafa Fernández está ahí denunciando escándalos en todas las federaciones deportivas, escándalos que ahí siguen, ahí siguen pasando. Bueno, ya, ya alguien hará algo. Es el momento en que el señor Francos haga algo. Ahora aproveche la inercia de este movimiento que se ha originado con la salida de Rubiales y limpie las estructuras del deporte en España. Que las limpie del todo. Que, por ejemplo, no permita que la Federación Española de Fútbol se elija a un presidente con apenas 150 votos. Porque si con 150 votos es suficiente para elegir al presidente de la Federación Española, con 75 76 tiene controlada la Asamblea. Es decir, con tener contentas a 76 personas, tiene garantizado ser el presidente de la Federación Española ad eternum.

Un deporte tan masivo y tan mayoritario como el fútbol, se controla única y exclusivamente teniendo bajo tu tutela a 76 77 personas ¿Eso parece serio? ¿Cuántos millones de futbolistas hay federados? ¿Cuántos millones de entrenadores de árbitros? ¿Cuánta gente vive del vive del fútbol? ¿Os parece normal que al presidente de la Federación Española lo elijan menos de 200 personas? ¿Os parece normal que baste con tener controladas a las federaciones territoriales para ser elegido presidente de la Federación Española? Ahora podría venir aquí el mejor gestor del mundo, con el mejor equipo del mundo de todo tipo, a nivel deportivo, a nivel médico, a nivel legal y no ganarían las elecciones y no ganarían las elecciones porque seguirían votando lo mismo que están en la Asamblea y votarían al suyo, que no sé si será Pedro Rocha o al que elijan, da igual quién viniera. Hasta que no se cambie eso, el deporte español no se va a modificar ni lo más mínimo.

Tenemos unos deportistas que tienen un nivel de calidad extraordinario, trabajadores. Realmente lo que ha conseguido el deporte español de los últimos años tiene un mérito excepcional y tiene un mérito adicional porque se ha conseguido a pesar de esta estructura que está ya absolutamente derruida, que es una estructura que está absolutamente caduca. A pesar de todo eso, nuestros deportistas han conseguido logros increíbles. Imaginaos cómo sería el deporte español si encima las estructuras sobre las que se cimenta fueran estructuras sólidas, fueran estructuras decentes correspondientes al primer mundo y no al mundo en el que nos encontramos nosotros, que no es ni el primero, ni el segundo, ni el tercero, ni el cuarto. Así que ahora es el momento de que Víctor Francos coja el toro por los cuernos. Todo esto está en sus manos y nosotros aquí vamos a ayudarle en lo que necesite, en lo que quiera, pero que se ponga manos a la obra, que con lo de Rubiales no se acaba el problema. Esto no ha hecho más que empezar.