España no solo es receptorá de estos estupefacientes históricamente fabricados en Holanda, sino que, de un tiempo a esta parte es también productora y exportadora de esta mercancía especialmente hacia el mercado suramericano.
Recientemente la guardia civil se incautó en el aeropuerto de Madrid de 18 litros de los productos necesarios para la fabricación de estas drogas sintéticas y se han desarticulado laboratorios en Tenerife, Barcelona, Madrid, Sevilla , Málaga y otras muchas ciudades.