Vicepresidenta electa de EEUU

Rubén Amón indulta a Kamala Harris: "Empieza a discutirse si sería una presidenta legítima"

Rubén Amón indulta en Más de uno a Kamala Harris tras haber sido elegida vicepresidenta de Estados Unidos después de los comicios en los que ha ganado Joe Biden frente a Donald Trump.

Rubén Amón

Madrid | 09.11.2020 10:24

Empieza a discutirse si Kamala Harris sería una presidenta legítima en caso de tener que sustituir a Joe Biden por razones de emergencia o de salud. Debate interesante, señores, porque se produce sin que Trump haya reconocido la derrota y sin que Biden haya accedido aún a la Casa Blanca. Dejémosle llegar antes de dar el botón a la operación Matrioska.

Que no es un sabotaje ruso, sino una bonita alegoría que el doctor Alsina dio conocer a la audiencia para reflejar la relevancia de Kamala Harris. O Kámala Harris, según he escuchado en las televisiones de ultramar. Legítima sería su entronización en el despacho oval. No solo porque la Constitución americana otorga los poderes al vice en caso de que no pueda desempeñarlos el vice, pero además porque Kamala Harris no ha sido exactamente la voz gregaria del ticket.

Todo lo contrario, ella misma parecía una creación antagonista y prematura de Donald Trump. Hombre y mujer. Blanco e india-afroamericana. Mayor y joven. Reaccionario y progresista. Este y Oeste de Estados Unidos. Las élites y la cuota de la segregación. No estaban los tiempos maduros para convertirla en la primera opción del Partido Demócrata, pero los cuatro años que se avecinan predisponen una transición de naturaleza sucesoria.

Biden sería la nodriza. Y aceptaría una especie de legislatura menos hiperpresidencialista de cuanto caracteriza la jefatura del Estado. Se trata de familarizar a Kamala, 53 años, con el templo, aunque la vice es todo menos una aprendiz. Senadora. Ex Fiscal General de California. Activista. Portavoz de muchas minorías y de no pocas mayorías.

Todavía vive su padre, inmigrante jamaicano y profesor de economía jubilado, pero no lo hace su madre, oncóloga de origen indio, tamil. Le sobrevive, a cambio, un consejo que Kamala hubiera tatuado en su cuerpo. "Hija mía, has sido la primera en lograr muchas cosas. Asegúrate de no ser la última".