"Alguien inventó una cuchara que contrarresta los temblores del Parkinson", dice Haiyan, "y vibra de forma opuesta a cómo se mueve la mano, lo que la hace estable para poder escribir". Inspirándose en la idea de crear vibraciones para contrarrestar los temblores, experimentó con varios mecanismos y probó un prototipo en otras personas con la enfermedad.
"Está afectando algo, pero no sé bien lo que está pasando", cuenta una de ellas, a lo que Haiyan añade que lo que está haciendo la pulsera es interrumpir el retorno que hay entre el cerebro y la mano y que causa los temblores. Y esta era la idea para Emma, distraer su cerebro con vibraciones intencionadas en su brazo…Tras varios meses de trabajo, creó una versión para ella…y Emma la probó.
"Me hace olvidar que me tiemblan las manos", dice Emma al tiempo que escribe y dibuja varias líneas rectas con una precisión sorprendente, algo que no practicaba hacía mucho tiempo. Llama también a su madre para decirle que ha podido escribir su nombre por primera vez en años y que la pulsera que le ha devuelto la ilusión se llama como ella, Emma.