EN BUENAS MANOS

El 17% de las parejas en edad de reproducción tienen problemas de fertilidad

Las parejas con problemas de fertilidad presentan más cuadros de ansiedad, disminución de la autoestima, menor inclusión en el entorno social y problemas sexuales y de pareja.

Redacción

Madrid | 21.07.2020 13:36 (Publicado 21.07.2020 13:22)

El 17% de las parejas en edad de reproducción tienen problemas de fertilidad
El 17% de las parejas en edad de reproducción tienen problemas de fertilidad | Redacción

La búsqueda de un bebé que no llega puede ser un proceso largo y duro, con desestabilidad emocional y desarrollo de inquietudes y malestares.

Según el doctor Enrique Pérez de la Blanca, jefe de la Unidad de Reproducción Asistida de Quirónsalud Málaga, “este proceso de fertilidad está ligado a un sinfín de emociones y sensaciones, que pasan de la alegría y la esperanza cuando se acerca el final del ciclo menstrual, a la tristeza y pena cuando llega la menstruación, iniciando todo el proceso de nuevo y, con él, toda esa montaña rusa de sentimientos”. Aunque muchas parejas pueden hacerle frente, “es aconsejable buscar un apoyo y acompañamiento estable que nos ayude a sobrellevarlo”, aconseja.

Las parejas con problemas de fertilidad presentan más cuadros de ansiedad, disminución de la autoestima, menor inclusión en el entorno social y problemas sexuales y de pareja.

De hecho, tal y como recoge Quirónsalud, estos problemas pueden derivar en otras patologías de gravedad, como estrés o depresión, acentuando más aún el desequilibrio emocional.

“Aunque hay grandes avances en la medicina que nos ayudan en el proceso y nos ofrecen mayores posibilidades, es importante entender que, con un diagnóstico de infertilidad, nos encontramos vulnerables”, explica el doctor Pérez de la Blanca. Este proceso genera sentimientos de vacío, culpabilidad e impotencia, que puede llegar a provocar desilusión y desamparo, incluso a la conclusión de que “tirar la toalla es lo más fácil”, continúa. Por lo tanto, “el abordaje del proceso de infertilidad ha de ser multidisciplinar, donde se trabajen de forma conjunta todos los aspectos, tanto psicológicos como médicos“, concluye el doctor Pérez de la Blanca.