Dulceida preocupó hace unos días a sus más de tres millones de seguidores al publicar una imagen desde las Urgencias de un hospital. Ante el aluvión de preguntas que recibió, la influencer se decidió a contar lo que le había sucedido con el objetivo de visibilizarlo, ya que sigue siendo un tema tabú a la hora de hablarlo.
"Es un tema tabú, pero voy a hablarlo con total naturalidad"
La catalana experimentó en los últimos días unos dolores muy fuertes en la zona del clítoris, dolores que la incapacitaron completamente y por los que tuvo que acudir al hospital: "Os voy a contar, aunque sé que es un tema un poco tabú, pero que al final nos pasa a todas, todas tenemos vagina y voy a hablarlo aquí con total naturalidad. El sábado empecé a notar muchas molestias en el clítoris, pero no le di importancia y el domingo me encontré muy mal por la mañana y fui a urgencias, a ginecología".
Aseguró que tras su visita al hospital, la doctora le djo que probablemente serían hongos, para lo cual le recetó óvulos. Sin embargo, la influencer siguió preocupada debido a que en otra ocasión tuvo candidiasis y "no se parecía, era un dolor en el clítoris brutal". Después de no mejorar, volvió a acudir al hospital con el "clítoris hinchazón como una nuez gigante" y asegurando no poder ni moverse ni levantarse: "No saben muy bien lo que es y me han pinchado. La zona está infectada y me han dado antibióticos y calmantes, pero si en 72 horas no mejoro, me tendrán que hacer una pequeña intervención".
Síntomas y tratamiento de la infección de clítoris
La inflamación de clítoris dolorosa y duradera que sufren algunas mujeres puede deberse a una infección. Por eso es necesario acudir al médico para que pueda revisarlo, diagnosticarlo y recetar el mejor tratamiento según el caso.
Según publica el diario 20minutos, la vulvodinia es una molestia o dolor crónico en la zona que rodea la abertura de la vagina (vulva) que no tiene una causa identificable y que dura tres meses como mínimo.
¿Cuáles son los principales síntomas? Ardor, inflamación, raspadura, escozor, relaciones sexuales dolorosas, sensación pulsátil y picazón. Las principales causas de esta afección son lesiones o la irritación de los nervios que rodean la región de la vulva, infecciones vaginales producidas con anterioridad, alergias o la piel sensible, además de cambios hormonales, espasmos musculares o debilidad en el suelo pélvico, que sostiene el útero, la vejiga y el intestino.