De esta forma, la Santa Sede se sumará a la decisión de la Asamblea General de la ONU de 2012 que reconoció al país presidido por Mahmud Abbas como "Estado observador no miembro" del organismo.
El reconocimiento formal de un Estado Palestino por el Vaticano tiene profundos intereses religiosos en los territorios ocupados por Israel que incluyen lugares cristianos sagrados, y supone una poderosa señal de legitimidad a los esfuerzos de la Autoridad Palestina, para lograr ser reconocido a pesar del estancado proceso de paz entre israelíes y palestinos.