La vicepresidenta del Gobierno ha formulado esta apreciación en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, tras preguntas de los medios de comunicación, horas después de activarse la segunda fase del protocolo de la ciudad contra la contaminación, que impide a los no residentes aparcar en zonas azules y verdes del centro y circular a más de 70 kilómetros por hora en la M-30 y otros accesos.
Sáenz de Santamaría ha ofrecido la colaboración del Gobierno en este asunto pero ha recalcado la importancia de que los poderes públicos, en este caso el Ayuntamiento, informen "muy bien" antes de tomar medidas de la naturaleza de las que ha adoptado la ciudad.
Tras considerar que la propia alcaldesa Manuela Carmena ha "reconocido" la "precipitación" y la "falta de tiempo" con la que se han adoptado las medidas de restricción del tráfico, la responsable del Ejecutivo ha expresado su deseo de que el Ayuntamiento de Madrid sea "consciente" de que en estos episodios "lo que es más importante siempre es la previsión".
"Cuando uno es previsor puede informar antes a los ciudadanos y recabar la opinión de todas las administraciones implicadas", ha recalcado Sáenz de Santamaría.