"Ni hubo independencia, ni hubo república ni la va a haber y espero que todo el mundo actúe con sentido común", ha enfatizado.
Así se ha pronunciado en una rueda de prensa en Sofía con el primer ministro de la República de Bulgaria, Boyko Borissov, poco después de que el expresidente catalán Carles Puigdemont y el nuevo presidente de la Generalitat, Quim Torra, hayan solicitado en una comparecencia desde Berlín que se ponga "día y hora" para iniciar "un diálogo sin condiciones" y "hallar una solución política al conflicto".
También han solicitado poner fin al control de las cuentas catalanas. Precisamente, este mismo martes Rajoy y el líder del PSOE, Pedro Sánchez, han apostado por "reforzar" su acuerdo político para defender el orden constitucional y ofrecer una respuesta "pactada y proporcional" contra cualquier "intento" de poner en marcha estructuras políticas distintas a las recogidas en la Constitución y el Estatut.
Además, han acordado que esta vigilancia en el cumplimiento de la legalidad se haga extensiva al presupuesto de la Generalitat para garantizar que no se dedican fondos públicos al proyecto secesionista.
Rajoy ha afirmado que ha ofrecido un acuerdo a Pedro Sánchez para seguir trabajando de manera conjunta como han hecho hasta ahora con el 155 y ha dicho que espera los que defienden la unidad de la nación, la Constitución española y el Estado de Derecho sigan "juntos".
"La unidad es un valor muy importante y haré lo que esté en mi mano para preservarlo", ha dicho.
El presidente del Gobierno ha señalado que lo que quiere es que se recupere la normalidad en Catalunya y ha rechazado hablar de qué líneas rojas deben producirse para aplicar otro 155 en Catalunya.
Según ha dicho, la ley la tiene que cumplir todo el mundo y en Catalunya "solo puede haber un presidente, una sola legalidad y unas únicas instituciones válidas, que son las que establecen la Constitución y el Estatut d'Autonomia".