Ya no hay pegada de carteles en la medianoche, pero sí actos electorales con presencia de los líderes de los grandes partidos, sabedores de que estas elecciones son trascendentales. Estos 15 días de campaña serán cruciales para los partidos en su objetivo de atraer a los votantes. El PP estará con Mariano Rajoy en Málaga, y el PSOE, con Pedro Sánchez en Madrid, al igual que Rosa Díez con UPyD y Pablo Iglesias con Podemos. Albert Rivera, líder de Ciudadanos, elige Barcelona, mientras que IU celebra su acto central en Zaragoza.
Hay muchas cosas en juego, ya que los líderes del PP o PSOE saben que los resultados de estas elecciones pueden afianzarles o no. Las formaciones emergentes, por su parte, quieren una oportunidad para ser relevantes porque, fijándose en IU o UPyD, saben que en cualquier momento pueden pasar a ser insignificantes.
8.116 municipios elegirán a su alcalde y 13 comunidades autónomas celebrarán sus elecciones. Todas las encuestas siguen diciendo que el PP sería el partido ganador a nivel general.
Desde Génova ven cada vez con más claridad que el mensaje de "este Gobierno nos está sacando de la crisis", es algo que contará a la hora de la verdad. Desde el PSOE confían en un cambio propiciado por el desgaste del Ejecutivo que hará que puedan conseguir alguna comunidad autónoma y varios municipios.
Los socialistas confían en mantener Asturias y recuperar Valencia y Castilla-La Mancha, en estos últimos casos, con un pacto con Podemos. Los populares, por su parte, contemplan a Ciudadanos como el partido que les está quitando los votos, pero al mismo tiempo consideran que puede ser la solución, ya que en las pasadas elecciones, el PP no podía pactar con nadie, mientras que ahora, tendría una formación con la que poder llegar a acuerdo.