En su intervención en el pleno del Parlament, ha asegurado que la aplicación de ese artículo se hace "al margen de las leyes del Estado, sin límites ni control democrático y buscando la venganza y la humillación", no solo del independentismo, sino de todos los catalanes.
Ha advertido de que el Estado "abre la caja de Pandora de la recentralización" y de que eso podría afectar al resto de España, y que lo hace al amparo de la UE, que considera que pretende avalar un recorte de derechos.
Gabriel ha exigido no justificar la intervención de la autonomía con que se pretende "devolver el autogobierno" a Cataluña, cuando una de las medidas implica suspender funciones del Parlament.
Por todo eso, ha pedido inteligencia para abordar la situación: "Pedimos que, pase lo que pase, intentemos que viva la inteligencia".