Denuncia la asociación ecologista ANSE

"La mala gestión del regadío es el origen de buena parte de los problemas ambientales de la cuenca"

Anse denuncia que la CARM se opuso en el consejo del Agua al esquema de Temas Importantes del plan de cuenca y se alineó con regantes y organizaciones agrarias, para evitar un mayor control sobre el regadío en la cuenca.

Rosa Roda

Murcia | 29.12.2020 08:51 (Publicado 29.12.2020 08:50)

"La mala gestión del regadío es el origen de buena parte de los problemas ambientales de la cuenca"
"La mala gestión del regadío es el origen de buena parte de los problemas ambientales de la cuenca" | Anse

ANSE recuerda que la cuenca del Segura no va a cumplir con la Directiva Marco del Agua (DMA), lo que puede traducirse en fuertes sanciones, y señala que va a resultar imprescindible aumentar la ambición ambiental del Plan de Cuenca, especialmente en medidas de control del regadío. "La DMA obliga a cumplir los objetivos ambientales no a satisfacer la demanda del regadío" advierte ANSE.

La Asociación de Naturalistas del Sureste ha remitido sendos escritos a la Confederación Hidrográfica del Segura y a la Consejería de Agricultura Agua y Medio ambiente. En el primero de ellos dirigido a la CHS, ha reclamado que de cara a la elaboración del Plan de Cuenca se aumente la ambición medioambiental para avanzar en el cumplimiento de la DMA, ya que como anunció el presidente de la Confederación, Mario Urrea, "nos encaminamos a un grave incumplimiento de la misma".

Igualmente, han remitido un escrito dirigido al Consejero Antonio Luengo y al Director General del Agua, Sebastián Delgado, para solicitar que reconsideren su oposición a la planificación hidrológica (alineándose con los regantes y organizaciones agrarias) a la vista del grave incumplimiento del Directiva Marco del Agua.

En sus alegaciones al EpTI, la Asociación de Naturalistas del Sureste señaló a la extensa superficie de regadío como la causa última de buena parte de las presiones que padece la cuenca. En este sentido, ANSE reclamó la reducción de la superficie de regadío (en primer lugar procediendo a la clausura del regadío ilegal). Como medidas complementarias, se solicitó la correspondencia inequívoca entre Unidades de Demanda Agrícola (UDA) y Derechos de Agua. Además, se pidió expresamente que se imposibilite el crecimiento futuro del regadío mediante amnistías o regularizaciones.

En sus alegaciones junto a WWF, ANSE destacó que era preciso afrontar 4 cuestiones clave de restauración ambiental de la cuenca del Segura en este periodo de planificación:

  • Evaluar el fracaso de los Planes anteriores en la consecución de los objetivos ambientales.
  • Gestión de Especies Exóticas Invasoras (EEI) con especial atención a la gestión del trasvase Tajo-Segura.
  • Recuperación de la conectividad fluvial.
  • Cumplimiento de las necesidades hídricas y contribución a la protección de los espacios y especies protegidas dependientes del agua, particularmente de la Red Natura 2000 y especies acuáticas de interés comunitario.

Además, ANSE recuerda que "la DMA obliga a cumplir los objetivos ambientales no a satisfacer la demanda del regadío". Además la asociación señala que del déficit declarado, "la mitad obedece a regadíos ilegales más agua no recibida del Acueducto Tajo-Segura, por lo que no debería considerarse como tal déficit. Únicamente, la sobreexplotación de subterráneas es déficit auténtico que debe resolverse mediante la ordenación y la reconversión de cultivos, tal y como apuntábamos anteriormente".

ANSE pide responsabilidad a la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia.

Anse denuncia que pese a la situación de futuro incumplimiento de la DMA, el consejero Luengo decidió oponerse a la planificación hidrológica, emitiendo un voto negativo justificado por un informe del Director General del Agua, Sebastián Delgado. Se da la circunstancia, denuncia la organización ecologista, de que el actual Director General del Agua fue un alto cargo de la Confederación Hidrográfica del Segura (Comisario adjunto 2016-2019) y conoce perfectamente la delicada situación en la que se encuentra la Cuenca respecto al cumplimiento de la normativa europea.

La votación resultó en empate técnico debido a la oposición tanto de la Comunidad Autónoma como de los regantes y organizaciones agrarias contrarios a las eventuales medidas de control del regadío que podría introducir el nuevo plan de cuenca.

ANSE subraya que "apostar por un regadío insostenible no solo resulta contrario a la Directiva Marco del Agua, sino que va contra el Green Deal europeo y la estrategia de la granja a la mesa, lo que puede afectar al prestigio del sector en el mercado comunitario".