El alcalde, Argimiro Marnotes, explicaba ayer que «unha vivenda no centro, con recollida diaria, pasará de pagar 64 euros ao ano, a pagar 72». Eso sí, en la modificación de la ordenanza fiscal se recoge que los vecinos en «situación de emerxencia social pagarán unha taxa única de 18 euros anuais», añadía Marnotes. Esta figura de las tasas especiales para la gente más desfavorecida no estaban hasta ahora reflejadas en las ordenanzas de O Carballiño. Y ahora aparecen en varias. También en la del conservatorio y la escuela de música. En estos casos se aprobará una subida del 20 % sobre el precio que se venía pagando, pero habrá reducciones para familias numerosas, según la renta (aquellas familias que cobren menos de 1.060 euros al mes tendrán una bonificación de entre el 10 y el 30 % en el precio) y para familias en situación de emergencia (que podrán ver reducida la cuota hasta un 75 %). También hay una subida en las escuelas deportivas municipales. El precio sube un 8 % en cada actividad (salvo el fútbol, que se incrementa un 15%).
Desde el PSOE ya han mostrado su rechazo a la propuesta del grupo de gobierno. «Está claro, xa con antelación, que imos a vivir un novo episodio do patético espectáculo que soen interpretar o alcalde e os seus secuaces, tentando xustificar suba tras suba e revestindo de necesidade a súa inesgotable voracidade recaudadora. O mesmo home que cando era candidato prometeu baixar a contribución e outras taxas, vai, por terceira vez consecutiva, a dar unha nova acometida ás economías das familias que con tanto esforzo tentan sair adiante nestes tempos de crise», criticaban desde la agrupación socialista.