PLENA INCLUSIÓN

El Ayuntamiento de Mérida cede a Plena Inclusión una parcela de 2.500 metros cuadrados para ampliar sus servicios

El Ayuntamiento de Mérida ha cedido a Plena Inclusión una parcela de 2.500 metros cuadrados durante 75 años en la calle Denario para construir un nuevo centro de habilitación funcional y atención temprana y ampliar así las plazas en los servicios que ofrece en la ciudad

ondacero.es

Mérida | 25.05.2023 14:33

El Ayuntamiento de Mérida cede a Plena Inclusión una parcela de 2.500 metros cuadrados para ampliar sus servicios
El Ayuntamiento de Mérida cede a Plena Inclusión una parcela de 2.500 metros cuadrados para ampliar sus servicios | Europa Press

Este centro estará situado junto a la residencia que Plena Inclusión tiene en la calle Cabo Verde, ha explicado la gerente de este colectivo, María Bazaga, en declaraciones a los medios este jueves tras la firma de esta cesión de terrenos entre el alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, y el tesorero de la, José Ramón López.

Con este nuevo edificio, ha indicado Bazaga, se aumentarán las plazas en habilitación funcional, atención temprana, centro ocupacional y el de día y en el resto de servicios y, como consecuencia, Plena Inclusión se trasladará a estas nuevas instalaciones.

En este nuevo centro, ha explicado separarán y ubicarán "en otras instalaciones" un centro de atención temprana, ya que mejorará la "calidad" a los 79 niños de 0 a 6 años que atiende "de forma personalizada" y en él se implica a las familias.

Mientras que se está construyendo este edificio, Plena Inclusión adaptará un centro que tienen en la calle Marquesa de Pinares para empezar a dar tratamiento "de manera inminente" a partir del 1 de julio.

El centro de Plena Inclusión, ha recordado, se encuentra en la calle Cabo Verde y cuenta con 3.000 metros cuadrados en el que más de un centenar de profesionales atienden a más de 400 usuarios, aunque ha señalado que se les ha quedado "pequeño".

Por ello, la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales ha apostado por eliminar las listas de espera para entrar en este centro, por estar en ella niños con diagnóstico "preferente", y les ofreció una adenda a partir del 1 de julio para aumentar 20 plazas para menores de 0 a 6 años en atención temprana que necesitan un reconocimiento "urgente", como transtorno en el neurodesarrollo o problemas en la socialización.

Asimismo, la consejería también les ha dado una adenda en el servicio de habilitación funcional de 15 plazas para niños mayores de 6 años por poseer una discapacidad que requiera tratamiento psicológico, de fisioterapia, de logopedia, terapia ocupacional y psicomotricidad.

Gracias a este aumento de plazas, ha señalado la gerente de Plena Inclusión, garantizará, durante "muchos años", la asistencia a los usuarios que posean discapacidad intelectual en la capital extremeña y en la comarca.

Posteriormente, ha relatado Bazaga, Plena Inclusión se reunió con el consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles, y con el director del Servicio Extremeño de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a la Dependencia (Sepad), José Vicente Granado, y ha asegurado que ambos se comprometieron a realizar de manera "urgente" el centro.

Además, ha resaltado que durante estos últimos años han realizado numerosos proyectos junto al Ayuntamiento de Mérida y ha asegurado que el primer edil tiene una "sensibilidad especial con el mundo de la discapacidad intelectual".

Por su parte, el alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, ha resaltado que esta firma del convenio para ampliar el Centro de Habilitación Funcional y Atención Temprana es un "momento importante" para la ciudad y para Plena Inclusión.

Gracias a esta cesión, según ha indicado el primer edil, se podrá otorgar una "mejor atención" a las familias y a los niños que se encuentran en este centro, por lo que ha agradecido a la entidad y a la Junta de Extremadura que lo sigan convirtiendo en "un referente a nivel regional".

Mientras, el tesorero de Plena Inclusión, José Ramón López, ha agradecido a las instituciones porque siguen velando por el "buen funcionamiento" de estos centros, ya que garantizan que los niños "tengan una vida digna" y que ejerzan "todos sus derechos".