Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes al Puesto de Talayuela (Cáceres), han investigado a un hombre por un delito de maltrato animal, tras hallar muerto a su perro en el interior de un vehículo en el que lo habían dejado mientras se bañaban en la Garganta de Alardos, en Madrigal de la Vera (Cáceres).
Los hechos tuvieron lugar en la tarde del día de ayer, 25 de junio, cuando, en torno a las 18:30 horas, los agentes recibían un aviso de la Central 062 de la Comandancia de Cáceres, para que se trasladaran hasta la Garganta de Alardos, en la localidad de Madrigal de la Vera (Cáceres), puesto que, al parecer, en el interior de un vehículo aparcado en la zona, se hallaba muerto un perro en su interior, presumiblemente, debido a un golpe de calor por las altas temperaturas que se estaban produciendo en estos momentos.
Los agentes se personaron en el lugar y constataron los hechos e identificaron al conductor del vehículo, y propietario del animal, quien les manifestó haber dejado al perro dentro del coche con un bebedero de agua dentro, pero que debió haberlo tirado.
Según relató su propietario, fue solo un momento el que dejaron dentro del vehículo al animal para bañarse en la garganta. Por estos hechos, los agentes han detenido al propietario del animal como supuesto autor de un delito de maltrato animal, con resultado de muerte. Las diligencias instruidas han sido remitidas al Juzgado de Primera Instancia e instrucción, en funciones de Guardia, de Navalmoral de la Mata (Cáceres).
Dejar solo al perro en el coche es peligroso
Los coches al sol funcionan como un horno, absorbiendo los rayos de sol y aumentando las temperaturas de su interior. La sensación de calor dentro del coche llega a ser sofocante, pues estas temperaturas se elevan constantemente y más rápido a medida que pasa el tiempo, pudiendo provocar golpes de calor no sólo a las personas, sino también a los animales que se encuentran en su interior.