Una jornada analizará el próximo viernes, día 7, en Badajoz, el rol del fisioterapia en la artosis.
Se trata de una jornada organizada por el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Extremadura, que se celebrará en su sede en la capital pacense, y que surge con motivo de la festividad del Día Mundial de la Fisioterapia, celebrada el pasado 8 de septiembre.
La sesión contará con la participación del presidente de la Asociación Española de Fisioterapeutas, Fernando Ramos; César Morales, médico especialista en Traumatología y Cirugía Ortopédica del Hospital Universitario de Badajoz; y el presidente de la Asociación Extremeña de pacientes con Espondiloartritis, Francisco Javier Muñoz.
El objetivo de esta jornada abierta a toda la sociedad es aportar información sobre esta enfermedad que afecta a 520 millones de personas en todo el mundo, y dar a conocer el papel tan importante que tiene el fisioterapeuta en su abordaje, las herramientas de manejo del dolor y mejoría funcional que tienen a su disposición y "no resignarse a vivir con la creencia de que 'con artrosis no se mejora'", explica la presidenta del Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Extremadura, María Eugenia Sánchez.
En la actualidad, la artrosis se presenta como el tipo de artritis más común y supone una de las principales causas de discapacidad a nivel mundial. En las próximas décadas, el mundo se enfrenta a un fuerte aumento de la demanda de operaciones de prótesis de rodilla, y algunos países prevén un incremento del 900 por ciento.
La artrosis es la enfermedad articular más común y los fisioterapeutas están muy familiarizados con el tratamiento de este tipo de patologías.
Con ello, desde la Fisioterapia existen múltiples intervenciones dirigidas a mejorar la salud articular de quienes la padecen, que actúan sobre los factores de riesgo modificables, contribuyendo a la mejora de los síntomas y la capacidad funcional y minimizando la progresión de la enfermedad con el paso de los años.
Por un lado, los fisioterapeutas aplican las intervenciones de tipo educativo para concienciar a la población sobre aspectos relacionados con el dolor y con la importancia de mantenerse físicamente activos, así como hábitos saludables que permitan minimizar el riesgo de progresión de la enfermedad.
Por otro lado, el ejercicio físico terapéutico prescrito por los fisioterapeutas permite prevenir o retrasar el deterioro funcional, reducir el dolor y la rigidez articular y evitar o retrasar la necesidad de una prótesis articular. Además, estos programas mejorarán el estado de ánimo, la calidad del sueño y la salud cardiovascular de las personas que padecen artrosis, repercutiendo positivamente en el mantenimiento de la autonomía funcional y la participación social. La artrosis puede ser tratada con éxito.