Algunos de los requisitos de esta certificación son: la correcta documentación de las actividades que se realizan para garantizar la calidad del servicio; contar con personal cualificado y con competencias específicas para realizar sus tareas; el mantenimiento correcto del equipamiento y los reactivos controlados, con especial hincapié en equipamientos críticos.
Esta renovación supone una evidencia de la excelencia de los procesos de la organización, garantizar su control y fomentar las mejoras en el desarrollo de la actividad.