Las mascarillas y resto de medidas de protección frente a la pandemia del coronavirus han protagonizado este miércoles el inicio del curso lectivo 2021-2022 en Infantil y Primaria, ESO, Bachillerato y Formación Profesional. Han compartido protagonismo con los nervios habituales en todos los inicios de un curso escolar, a los que en nada afecta ni cambia la presencia de la pandemia.
Como novedad significativa desde la llegada de la covid-19, en esta ocasión las clases han arrancado con el cien por cien de presencialidad, si bien manteniéndose medidas que ya se vivieron el pasado curso escolar como son el uso de la mascarilla, la ventilación regular de las aulas, el uso de dispositivos con filtros HEPA y la distancia social en las aulas de los institutos. Ahora bien, esa distancia de seguridad para minimizar el riesgo de contagio por coronavirus se ha reducido a 1,20 metros, situación que ha sido posible gracias al avance de la campaña de vacunación contra el coronavirus.
Más de 35.000 estudiantes en Elche
En Elche el curso 2021-2022 ha comenzado para más de 35.000 estudiantes de Primaria y Secundaria, con 250 docentes contratados por la Conselleria de Educación como refuerzo por la covid-19 y con 588 solicitudes de escolarización presentadas fuera plazo, que han tenido que ser atendidas y ubicadas en los distintos centros docentes que hay en el municipio.
“Este va ser el curso escolar de la vuelta a la normalidad académica y de la mejora de las infraestructuras educativas en Elche”, ha destacado Carlos González, alcalde de Elche, quien junto a María José Martínez, concejala de Educación, ha visitado el instituto de la pedanía de La Hoya y los colegios El Plá y Jorge Guillén: “Las clases han comenzado con un ambiente de normalidad, ilusión, ánimo y esperanza por recuperar la presencialidad”.
González ha destacado “el gran esfuerzo que se ha llevado a cabo por parte de la conselleria, de los equipos directivos de los centros educativos y de la Concejalía de Educación” en el inicio del curso y ha añadido que ha comenzado “un curso marcado por la recuperación de la presencialidad y por la ilusión que desprende el profesorado, así como los alumnos y alumnas después de un curso tan difícil como el que vivimos el año pasado”.
