Los desahucios han vuelto. En plena crisis sanitaria de la covid-19 y en medio de los efectos económicos negativos que la misma ha arrastrado, Elche ha registrado un repunte significativo en la ejecución de desahucios en la ciudad, según ha desvelado este martes la Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH) Elx-Crevillent, que en las últimas semanas ha asistido a cinco familias afectadas por un desahucio y que la próxima semana tiene dos más a la vista.
La crisis sanitaria, tanto por sí misma como por sus efectos económicos negativos, agudiza los problemas propios de cualquier desahucio por el que una familia corre el riesgo de quedarse en la calle, sin techo.
La reducción de ingresos de las familias a raíz de la pandemia y el endurecimiento de las condiciones del mercado de alquiler de viviendas pone también su aportación decisiva para dificultar aún más la situación.
La problemática de los desahucios no distingue de edades ni clases y sociales, y de hecho, la próxima semana, para el lunes, hay fijado en principio el de una vivienda propiedad de una pareja de ancianos de 70 años de edad que en su día avalaron a un familiar y ahora el banco se queda la vivienda que durante su vida han pagado.
También la semana que viene, está prevista la ejecución de otro desahucio que afecta a una mujer con sus hijos. La persona desahuciada era su madre, fallecida recientemente, y la mujer con sus hijos corre el riesgo ahora de quedarse en la calle.
En ambos casos, la PAH Elx-Crevillent confía en poder paralizar de forma momentánea los desahucios atendiendo a la situación de vulnerabilidad de los afectados. Pero éstos seguirán teniendo sobre sí la espada de Damocles del riesgo de quedarse sin recurso habitacional.
La PAH Elx-Crevillent está reclamando una moratoria en la ejecución de todos los desahucios, sin distinción de ningún tipo, hasta finales del próximo año.
