El internacional argentino ha estado en la órbita de clubes importantes como Roma o Lyon, pero las exigencias económicas de River han abortado cualquier negociación en un mercado restringido por las estrecheces económicas de los clubes. Caídas dichas opciones, la opción del Villarreal ha sonado con fuerza en las últimas horas en la prensa bonaerense. Incluso la directiva, con el presidente Rodolfo D’Onofrio y Enzo Francescoli a la cabeza, se habría reunido en la tarde de este martes para estudiar la situación y el futuro del jugador.
Pero la realidad es que el club de La Plana está lejos de los ocho millones más dos opcionales que demandaría River por el fichaje de un jugador que queda libre en junio. Y tiene claro que no va a hacer un esfuerzo extra que rompa con el equilibrio presupuestario en un año tan delicado como el actual. Así se lo han hecho saber a Unai Emery. De la la misma forma tampoco se fichará a un futbolista que no se considere como una opción interesante de cara al futuro. Es decir, harán bueno aquello de que no “ficharán por fichar”.
De todas formas la entidad castellonense seguirá abierta a una llegada hasta última hora habida cuenta la situación del plantel y el exigente calendario. Las lesiones de Mario Gaspar y Juan Foyth dejan al Villarreal en una situación delicada en la banda derecha defensiva, donde Ruben Peña es el único activo para una fase de la temporada especialmente cargada de partidos.