Isabel Aires
Madrid | 28.05.2020 14:02
Después de más de dos meses de confinamiento y estado de alarma, ya podemos ir saliendo a la calle. Aunque hay muchas tiendas abiertas, me he acostumbrado a eso de que me lo traigan a casa. Es más cómodo, más rápido y seguimos cumpliendo un poquito con eso de #yomequedoencasa. Y como dice el refrán, a nadie le amarga un dulce…
Os traigo pastelerías que tienen servicio a domicilio, y que además tienen algo especial, son artesanas, muy de Madrid, y con tartas un poco más diferentes, que yo no soy mucho de la típica de San Marcos o Selva Negra…
Nos vamos a ir primero a Dulce Consentido (https://www.dulceconsentido.es/). Porque… quien no tiene un amigo vegano, o diabético, o alérgico a la leche o celiaco (que por cierto ayer fue su día). Y yo, como en una de esas reuniones va a estar una de mis chicas, Beatriz que es celiaca, pues pido aquí la tarta y sé que no hay problema con los alérgenos. Porque, en este obrador de Tres Cantos elaboran de forma artesanal una amplia variedad de productos libres 100% de gluten, leche, huevo y frutos secos, para hacerlos accesibles a todos. Reparten a muchos municipios de la Comunidad de Madrid y a Madrid Capital. Las hacen de varios tamaños, desde individuales hasta para 10 personas.
Yo he pedido una que se llama Buttercream de rosas (Bizcocho de chocolate relleno y cobertura de crema de mantequilla de rosas) y una de Té matcha que estoy deseando ya probar. Además puede pedirse también congelada que es ideal para el buen tiempo.
Para otro de los grupos voy a pedir en la Pastelería Saúl (https://www.pasteleriasaul.es/) donde desde que soy pequeña y ya comía sus famosos croisanitos, que compraba mi madre en la tienda de Arturo Soria, y me tienen ganada. Son unas pastelerías que la primera la abrió Saúl en los años 50, y a día de hoy tienen ya 5 tiendas por todo Madrid y siguen manteniendo su obrador, su buen hacer y la calidad de sus materias primas.
Aquí voy a pedir los bocaditos de cielo convertidos en pequeños croissants y la tarta Red Velvet, que es un bizcocho de brownie rojo, crema de queso y crema de mantequilla que es un espectáculo.
Otro sitio que me encanta y al que también voy a pedir es a Pastelerías Manacor, que aun con nombre muy balear, llevan abiertos en Madrid nada más y nada menos que desde 1753, y ya son 8 generaciones las que llevan endulzándonos la vida. La familia Martín Pérez trabaja bajo los mismos valores generación tras generación: respeto por el producto, pasión por el cliente y responsabilidad con la sociedad y con el medio ambiente.
Tienen 8 tiendas por toda la comunidad y aquí voy a pedir para que me traigan a casa, una tarta Saint Honoré que se hace en honor al patrón de los pasteleros, que era San Honorato de Amiens, y que en Manacor la bordan. Es un pastel de hojaldre y profiteroles cubiertos de caramelo con centro de merengue soufflé y nata que quita el sentido.
Y, por supuesto, tengo que pedirle a mi querida Ana Guerrero del Horno San Onofre (https://pasteleriasanonofre.com/) que además de tener ya sus tiendas abiertas, sirven a domicilio y le voy a pedir una tarta muy madrileña y muy de temporada como es la ‘Aranjuez’, que lleva una base de bizcocho genovés suave con compota de fresa y capa fina de crema inglesa, granillo de pistacho y fresón de Aranjuez natural como cobertura.
Prometo hacer mucho deporte para quemar todo esto después, pero mientras, ¡a celebrar la vida!