En cambio, dice Roncero, votaron en contra de dar subvenciones a asociaciones que luchan todos los días contra enfermedades como el cáncer o el ELA, de aumentar las partidas económicas para luchar contra el desempleo, de aumentar la partida de apoyo a nuestra Semana Santa, que es la celebración que más ciudadrealeños saca a las calles y supone, cada año, un revulsivo para la economía de la ciudad, o de un plan de asfaltado y arreglo de calles “que llevan tres años abandonadas, aun habiendo dinero para ello”.
Califica la concejal “popular” de “auténtica vergüenza” que Pilar Zamora quitara primero la subvención nominativa para bandas de música a la Asociación de Cofradías de Semana Santa, aludiendo que por ley no se podían dar ese tipo de subvenciones, y ahora se la da a dos sindicatos amigos, y es que, a juicio de Roncero, “Pilar Zamora no tiene pudor alguno a la hora de mentir a los vecinos de Ciudad Real, una mentira más que añadir a las de las remunicipalizaciones, quitar la Zona Azul, las veintiséis empresas interesadas en el polígono de SEPES, o las obras anunciadas en numerosas ocasiones y que nunca empiezan”.
Al hilo de esta cuestión, se pregunta Rosario Roncero cuánto tardará la señora Zamora en comprar el vagón y pagar a los sindicatos su subvención, teniendo en cuenta que el nivel de ejecución de las inversiones de los dos presupuestos anteriores de Pilar Zamora fueron de un 10% y un 18%, respectivamente, “algo vergonzoso y que evidencia el grado de trabajo y compromiso de Pilar Zamora”.
Según Roncero, todo esto muestra claramente cuáles son las prioridades de Pilar Zamora, que no son otras que contentar a unos pocos frente a la mayoría de los vecinos de Ciudad Real, para seguir ocupando el sillón de la Alcaldía sin reparar en el daño que está haciendo a esta ciudad.