Albacete es más peatonal. La almendra central “se ha convertido en un lugar de encuentro”, ha declarado el alcalde, Emilio Sáez, durante los actos de inauguración de la renovada calle Marqués de Molins y plaza del Altozano, espacios ahora peatonales, junto con la mejora integral de Tesifonte Gallego.
“Hemos ganado este eje cívico para las personas”, ha resaltado Emilio Sáez, “lo hemos ganado para el paseo, para la cultura que estará siempre muy presente en esta calle, para el comercio, ya se están abriendo nuevos establecimientos, y la gastronomía, que tiene que seguir funcionando”.
La transformación del eje que va desde la Plaza de Gabriel Lodares hasta el Sembrador, concluirá una vez se termine la remodelación del Paseo de la Libertad,que en uno de sus carriles también será peatonal, y cuya obra se retrasó con el hallazgo de unos restos arqueológicos procedentes de un antiguo convento, tal y como ha recordado el alcalde.
Con esta transformación, el centro de Albacete se vuelve más sostenible, tras una inversión cercana a los 4,2 millones de euros, para cuya financiación el Ayuntamiento de Albacete ha recibido una aportación que ronda los 4 millones de euros de los fondos Next Generation, gracias al programa de ayudas a municipios para la implantación de zonas de bajas emisiones del Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana.
Una calle que resurge
Además de convertir la ‘almendra central’ en una zona de bajas emisiones, esta transformación del eje histórico de Albacete ha contribuido a su resurgir, tanto a nivel comercial como artístico, pues los edificios modernistas que adornan la calle, obra de apellidos tan ilustres de la arquitectura como Carrilero, Ortiz e Iribas, Rubio, Muñoz, Martínez Villena, García Pellicer o Pérez Villena, pueden contemplarse como hasta ahora no había podido hacerse.
Desde el Ayuntamiento de Albacete, agradecen la paciencia de vecinos y vecinas, comerciantes y hosteleros, durante estos meses de obras, desde el convencimiento que el resultado ha merecido la pena.
