El secretario general del PRC, Miguel Ángel Revilla, ha anunciado hoy que lo seguirá siendo en 2024. Después de casi una hora de intervención, Revilla ha recalcado que se encuentra "muy bien" de salud", por lo que la sucesión al frente de la formación se hará "cuando toque". "Estamos en ello, pero no nos va a poner nadie una pistola para que lo hagamos mañana o pasado", ha subrayado.
Palabras de Miguel Ángel Revilla en su tradicional discurso de Navidad en el almuerzo que ha congregado en el Hotel Milagros Golf de Mogro a más de un millar de militantes y simpatizantes.
Y es que, según Revilla, tanto el partido como "sobre todo" él mismo están trabajando en el relevo, pero ha admitido que "no es fácil" y "va a costar" encontrar a quien le sustituya, porque como creador él ha instaurado "una imagen y un carisma", pese a que la formación cuenta con "gente mejor". "Como ahora no me duele nada, por qué voy a tener yo que precipitar acontecimientos que empiecen a crear burbujas que tienen otros partidos, pero nosotros no", ha cuestionado.
Revilla ha destacado que su objetivo es dejar el PRC en "unas condiciones que puedan incluso superar lo conseguido hasta ahora", porque -ha dicho- "este partido es para toda la vida, con Revilla o sin Revilla" y ahora que cumple 45 años, "los mismos que la Constitución Española", goza de "muy buena salud". "Por desgracia, tenemos mejor vida que la propia Constitución, cuestionada por tantos; estamos más vivos que la Constitución", ha apostillado.
Una premonición para 2027
De hecho, ha asegurado tener "una premonición" y ha augurado que en 2027 volverá a repetirse lo ocurrido en 2015, cuando el Partido Regionalista volvió al Gobierno tras la mayoría absoluta del Partido Popular.
El líder regionalista ha recordado en su intervención a dirigentes históricos ya fallecidos, como Eduardo Obregón, Santos Fernández Revolvo o Rafael de la Sierra, y ha repasado los logros de la formación, desde la consecución de la autonomía hasta el cambio de rumbo conseguido a partir de su llegada al Gobierno en 1995, cuando Cantabria dejó de ser una Comunidad Autónoma "corrupta", sin presupuestos y marcada por el "transfuguismo" para iniciar una etapa de "estabilidad", en la que se han conseguido avances en todos los órdenes, desde las carreteras al aeropuerto, pasando por el puerto de Santander o la mejora de la educación y las políticas industriales y ganaderas. Por ello, ha dicho, el PRC "puede presumir de muchísimas cosas".
También ha puesto en valor que, tanto con el PP como con el PSOE, los regionalistas han gobernado sin tener "ni un lío", a diferencia de lo que ocurre ahora en la política y el contraste entre "lo que se dice a los ciudadanos y lo que luego se hace".
"Hemos cambiado la región y la pregunta ahora es por qué el palo tan grande en las elecciones", ha continuado Revilla, quien ha atribuido los resultados de los comicios del pasado mes de mayo a "poderes que uno no puede controlar", frente a un partido como el PRC, que ha sido el único obstáculo para que el PP obtenga mayorías absolutas en Cantabria como la que tiene en Santander y que impide que el PSOE sea la segunda fuerza política, como ocurre en el resto de las comunidades.
En este contexto ha aludido al escándalo de los trenes conocido en el mes de febrero, al que siguió la trama de corrupción en la Consejería de Obras Públicas, la cual se saldó "sin ningún político implicado", pero -ha dicho- "nos llevó por delante". "Podía haber salido un año antes o cuatro meses después, pero salió en el momento procesal oportuno", ha apuntado.
También se ha referido al apoyo "gratis" que el PRC ha brindado al actual Gobierno del PP para que no tenga que recurrir a partidos como Vox, con el que está demostrando "auténtico señorío", y ha avanzado que mantendrá esta misma posición a la hora de defender los grandes proyectos estratégicos para el futuro de Cantabria.
Finalmente, Revilla ha aludido al panorama nacional "tremendo" que está viviendo España y ha opinado que la gente "no entiende lo que se está haciendo", al tiempo que ha recomendado al PP que huya de las "tentaciones" de Vox y ha condenado las movilizaciones "delante de las sedes de personas y partidos", un comportamiento que "no cabe en el ideario del PRC".