El presidente de la Pequeña y Mediana Empresa de Baleares (Pimeb), Jordi Mora, ha reclamado este viernes al Govern un plan de choque "contundente y bien dotado" para salvar "el máximo tejido productivo de aquí al verano".
Así lo ha confirmado en rueda de prensa tras asistir en el Consolat de Mar a la reunión con la presidenta del Govern, Francina Armengol, y el resto de representantes de CAEB, CCOO y UGT, donde se les ha comunicado las nuevas medidas restrictivas frente a la expansión de la pandemia en Mallorca.
Mora ha calificado como "muy duras" las medidas planteadas ya que implican el cierre de bares, restaurantes y grandes superficies durante 15 días. Así, ha reconocido que la situación es "muy complicada" tanto a nivel económico, laboral y empresarial. De ahí que haya exigido que el plan de choque esté dotado con hasta 600 millones.
Por su parte, la presidenta de CAEB, Carmen Planas, ha insistido en que las nuevas restricciones, "que son durísimas", son "necesarias" ante el incremento de casos. También Planas ha solicitado que baje la presión fiscal para los empresarios y la "protección" con ayudas para el tejido empresarial de Baleares.
