La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha explicado este martes que el Govern está a la espera de que el Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJIB) de el visto bueno al mantenimiento del toque de queda y la limitación de personas en reuniones sociales en Baleares, entre otras medidas, cuando decaiga el estado de alarma.
Así lo ha señalado en una rueda de prensa en la que se ha presentado un plan para la reactivación turística junto al conseller de Modelo Económico, Turismo y Trabajo, Iago Negueruela.
La presidenta ha explicado que el Ejecutivo autonómico ha pedido autorización previa al TSJIB --"que es el que se tiene que pronunciar", ha señalado-- para poder seguir aplicando las medidas restrictivas que afectan a derechos fundamentales y que están sujetas a la declaración del estado de alarma.
En concreto, además del toque de queda y la limitación del número de personas en reuniones sociales, el Govern quiere mantener los controles de pasajeros nacionales en puertos y aeropuertos mediante pruebas diagnósticas y la limitación de aforos en lugares de culto. "Seguiremos pidiendo que se puedan aplicar estas medidas porque creemos que son necesarias", ha apuntado.
Así, según ha dicho la presidenta, cuando se pronuncie el TSJIB se podrán tomar las decisiones oportunas aunque, "obviamente", ha añadido, las limitaciones que son competencia de la Comunidad Autónoma se seguirán aplicando.