Emprendimiento

Re-Viviendo busca soluciones de vivienda en el medio rural aragonés

Aragón se convierte en el epicentro nacional del emprendimiento social de la mano del Desafío Ashoka Changemakers. El objetivo es encontrar soluciones sostenibles que generen empleo, que ayuden a frenar la despoblación y que ofrezcan un futuro a todos los territorios.

Lourdes Funes

Zaragoza | 26.10.2023 11:31

La Fundación Ashoka, con la colaboración de IKEA y el apoyo de Bridge for Billions ha lanzado un Desafío al que han llegado diez proyectos, dos de ellos, aragoneses: Mujeres Increíbles, de Yoneice Pineda, que enfoca su actividad en el empoderamiento femenino, y Re-Viviendo de Cecilia Falo, dedicada a dar solución a la falta de viviendas en el medio rural.

En torno a un 60% de los jóvenes entre 18 y 35 años ha pensado en irse a vivir al pueblo por lo que Celia Falo, de Re-Viviendo, explica que decidieron hacer un estudio de porque una causa por la que no lo hacían era que no había vivienda. Esta realidad se sucede en muchas localidades aragonesas y españolas y son muchas las causas por las que no se puede comprar o alquilar una vivienda en el medio rural. Pero no sólo eso, también se acompaña a quienes se asientan a vivir en el medio rural porque según los informes realizados, si no hay arraigo o integración, a los dos años se abandona la aventura rural.

Falo cuenta cómo hay una gran paradoja, no hay viviendas para vivir, pero sin embargo hay mucha vivienda cerrada o infrautilizada. Por eso, a través de Re-Viviendo, se trata de buscar soluciones: propietarios que sólo van en verano, situaciones en las que es necesaria una mediación judicial, etc. Precisamente, una de las conclusiones que se han encontrado en la elaboración del proyecto es que, en muchas ocasiones, la reticencia de vender una casa es por motivos emocionales.

Re-Viviendo es un proyecto que está enfocado a diversos perfiles: propietarios que tienen una casa en el medio rural, personas que quieren ir a vivir a un pueblo y a las administraciones que quieren impulsar la vida en sus pueblos a través de atraer población.

Para Cecilia Falo, la experiencia que ha supuesto participar en el programa de acompañamiento impulsado por la Fundación Ashoka ha sido muy positiva porque les ha ayudado a ver diferentes líneas de emprendimiento, pero siempre enfocado a un impacto social positivo y sostenible, no sólo con el medio ambiente sino también con el propio territorio.