El número de ingresos en los hospitales aragoneses se ha estabilizado entorno a los 500 pacientes, una cifra que desde el Departamento de Sanidad creen que pueden asumir. Sin embargo, reconocen que la situación es bien distinta en los centros de salud porque los profesionales de Atención Primaria deben gestionar el día a día de la pandemia.
Médicos y enfermeras piden refuerzos porque se encargan de realizar pruebas PCR, llamar a los positivos o controlar que se cumplen los aislamientos. La responsable del área de Ejea de los Caballeros, Raquel Llera, explica que en esa localidad la situación se complica porque llevan tres semanas con el confinamiento perimetral.
Desde el Gobierno aragonés reconocen que la situación en algunos centros es complicada, ya que la vuelta al cole ha obligado a realizar más pruebas PCR y en algunos casos los resultados se están demorando. La consejera de Sanidad, Sira Repollés, reconoce que estudian reforzar los servicios del 061, que se encargan en Zaragoza de trasladarse a los centros para realizar las pruebas.
También señala que los Centros de Salud que se ubican en zonas con más contagios están “tensionados” por el alto volumen e pruebas que realizan. En esos casos se envían refuerzos de personal, y aplicarán otras medidas en caso necesario.