El Real Madrid jugará las semifinales de la Copa del Rey tras derrotar al Espanyol (1-0) con una pobre versión y por idéntico resultado al cosechado en el partido de Cornellà El-Prat, gracias a un solitario gol de Jesé Rodríguez a los siete minutos, que anuló cualquier reacción 'perica' para intentar voltear la eliminatoria.
La declaración de intenciones merengue fue notable, sobre todo por el inicio acosador y por el gol de Jesé, de lo poco destacable sobre el césped del Bernabéu este martes. Un excelente pase de Xabi Alonso, de más de 60 metros, terminó en los pies del canario, que definió con maestría en una de las pocas opciones que dejó Casilla.
El meta espanyolista fue lo mejor de su equipo y mantuvo su particular batalla con Cristiano Ronaldo, quién no le ha podido marcar en los tres partidos que han jugado Madrid y Espanyol en el último mes. El de Madeira, obcecado en el lanzamiento, tampoco estuvo acertado y terminó algo desquiciado con el portero 'perico'.
El 1-0, con la exquisitez de Jesé, escondió el pobre fútbol de los blancos, que protegen con su pegada la falta de fluidez. De igual manera que el Espanyol que parecía conformarse con la exigua derrota. El equipo de Ancelotti sigue sin transmitir, aunque sus victorias le confirmen como indiscutible candidato a todo, sobre todo por los tropiezos de sus rivales en las últimas semanas.
Aún así, el Real Madrid --que ya suma ocho partidos sin encajar gol-- [Casillas batió el récord de imbatibilidad con 658 minutos] necesitará dar mucho más de lo que dio este martes si quiere optar a la 'Décima' a o la pelea por el título de Liga. Sobre todo porque el Espanyol no es el Bayern, ni el Chelsea, como hasta hace poco recordó su entrenador Javier Aguirre al ser preguntado por su delantero John Córdoba.
El jugador colombiano volvió a errar un mano a mano ante Casillas, aunque luego fuese anulado por fuera de juego; mucho antes de que Joan Capdevila rematase sin suerte en una falta lateral y de que Cristiano volviese a toparse con Casilla nada más comenzar el segundo tiempo.
Al final, ni unos ni otros pusieron picante en un acto final que careció de sentido. David López regresó con los blanquiazules y Teixeira Vitienes se empeñó en expulsar a Víctor Sánchez por doble amonestación. Los de Ancelotti, que deben meter la quinta marcha, se medirán al Atlético de Madrid o Athletic Club en la ronda previa a la final.