La situación está paralizada por circunstancias lógicas. Tanto Ter Stegen como el Barça entienden que ahora no se da la situación para sentarse y que después de la crisis actual el deseo de las dos partes es discutir sobre esa renovación.
Por lo tanto, tranquilidad y, cuando pase la pandemia, no debe haber problema para ampliar un contrato que ahora vincula al portero alemán hasta 2022.