Con esfuerzo. Con sudor. Con intensidad. Así anuló el Málaga al Atlético. Corriendo más, así superó el Málaga al Atlético. Planteando un partido con intenso, muy intenso. Un partido con poquísimo fútbol, trabado y con más juego a ras de suelo que con el balón rodando. Eso bastó. Eso valió para que el Atlético se dejara tres puntos, se dejara un punto. Se dejara el liderato en solitaro en un duelo incómodo, en el que nunca estuvo en el partido y en el que Charles batió a Oblak para dejar el triunfo en La Rosaleda.