El corredor vizcaíno compartía concentración en Colombia con Egan Bernal cuando éste sufrió la aparatosa caída que casi le cuesta la vida. “Al momento nos dimos cuenta de la gravedad”, relata.
A punto de estrenarse con Ineos, no desdeña “ser un gran gregario. Es un perfil muy apreciado”, aunque no renuncia a luchar por algún triunfo de etapa. “Ganar en la Vuelta me haría ilusión para cerrar el círculo de levantar los brazos en las tres grandes”.