Leyendo los tuits justicieros de Quim Torra he recordado un verso infalible del poeta peruano César Vallejo: “¡Cuídate, España, de tu propia España!”. Parece que en un rato este hombre sulfuroso que insulta a destajo apelando a la pureza de raza, justificará su vida de excedente político al ser nombrado President de la Generalitat por deseo imperial de Puigdemont.

Desconozco si la lucha feminista es el nuevo 15M, pero sospecho que estos últimos meses vibrantes (a 50 años de Mayo del 68) apuntan a un cambio de paradigma que lleva incubándose con fuerza desde algo más allá del siglo XX. Bien está.

Ya sabes que murió el doctor Montes, presidente de la asociación Derecho a Morir Dignamente y quien fuera arrasado en lo personal y en lo profesional por uno de los gobiernos de la lejanísima Esperanza Aguirre. Su delito no fue ninguno, según la absolución de la Justicia en 2007.

Una vez cumplida la convención del Partido Popular alguna encuesta dice que sube Podemos y con una pingaleta se pone al rebufo del PSOE. Es la consecuencia natural ante un socialismo que está, políticamente, al mismo nivel de trato que el bombero torero.

Ayer, de estar vivo, el gran poeta alicantino Juan Gil-Albert habría cumplido 114 años. Y hace cuatro días se recordaba también el 76º aniversario de la muerte (inducida) de otro rotundo poeta, Miguel Hernández. Así que la primavera arranca fuerte. Luego están los asuntos de la jornada en el primer lunes después de la Semana Santa.

Parece que Putin ha arrasado en las elecciones de Rusia, según estaba previsto. Este ex agente del KGB que hasta los 40 años era un don nadie, entiende bien el mecanismo nacionalista del ruso de a pie de urna, que es el sujeto que importa para su causa.