Aprovechando que han distinguido con el Princesa de Asturias de Humanidades a Nuccio Ordine, hagamos hoy un elogio de la inutilidad. No de los inútiles, que son legión y a veces parece que nos rodean, sino de la utilidad de lo inútil. Es decir, del conocimiento.
Útil, tiene escrito el profesor Ordine, es todo aquello que pareciendo inútil nos ayuda a hacernos mejores. Puede parecer que un martillo vale más que una sinfonía, un cuchillo más que la poesía y una llave inglesa más que un cuadro. Pero sólo porque la utilidad del utensilio es más fácil de ver que la utilidad de la música, la literatura y la filosofía. Y porque sólo comprendiendo la utilidad de lo inútil se comprende el arte.
La esencia del conocimiento: saber, aprender, crecer
Sí, pongámonos culturetas hoy desde primera hora para revindicar, con Ordine, el valor supremo de la educación y la enseñanza. Porque una mala enseñanza es un pecado y porque la rutina pedagógica es destructiva. Cuenta Ordine que el japonés Okakura, al describir el ritual del té, escribió que el momento preciso en el que la especie humana se elevó por encima de las bestias fue cuando un hombre primitivo ofreció a su amada una guirnalda. Descubrió el doble lujo de dos cosas inútiles, la flor y el gesto de cogerla, poniendo para siempre en cuestión lo necesario y el beneficio.
Saber. Aprender. Crecer. Un lujo considerado inútil que es el más útil de los instrumentos de oposición a la barbarie
Sócrates aprende a tocar con su flauta una nueva melodía mientras sus verdugos le están preparando la cicuta. Le preguntan: ‘¿Por qué tocas, de qué va a servirte ya?’ Y él responde: ‘Me servirá para conocerla antes de morir’.
Dice Cioran que ésta es la esencia del conocimiento. Saber. Aprender. Crecer. Un lujo considerado inútil que es el más útil de los instrumentos de oposición a la barbarie. El agua de los peces en el cuento de Foster Wallace. Dos peces jóvenes que van nadando y se cruzan con un pez viejo. El viejo les pregunta: ¿Cómo está el agua? Y los dos jóvenes se miran y uno le pregunta al otro: ¿Qué demonios es el agua? A menudo lo más importante para poder seguir avanzando es lo que más cuesta ver y lo que más cuesta explicar.
Sesión doble del sábado: coronación y final de copa
Encaramos el primer fin de semana de mayo, con el personal planificando ya la sesión doble del sábado. Por la mañana se emite la coronación de un rey en Inglaterra, por la noche se decide quién gana un torneo futbolístico que lleva el título del rey en España.
Parada de testas coronadas, herederos y príncipes republicanos en la Abadía de Westminster -más que una entronización es casi una consagración del eterno aspirante, Charles (Carlos) de Inglaterra- y duelo desigual a la noche en La Cartuja: Osasuna acariciando el sueño de doblegar a Florentino, a Carletto y al séptimo de caballería blanco. En resumen, activista, de Daniel Ramírez García-Mina, el nuevo, lo que anhela la afición navarra es que mañana gane ¡el peor! ¡Que gane el peor!
Venga a aterrizar aviones oficiales en los aeropuertos de Londres, que no se entere Greta
Lo de Londres es mañana pero empieza hoy. Bueno, lleva empezando toda la semana, encadenando el rey Charles actos, preparativos y recepciones. Este mediodía sienta a comer a los representantes políticos de los países de la Commonwealth, luego recibe a unos cuantos invitados extranjeros y a la noche invita a cenar a sus cofrades de las monarquías aún reinantes. Va a llegar este hombre a la coronación de mañana hecho unos zorros. Venga a aterrizar aviones oficiales en los aeropuertos de Londres, que no se entere Greta que le quita para siempre al rey Charles la etiqueta de príncipe del ecologismo.
Bolaños no está invitado a la cena de Buckingham
La cena en Buckingham, por cierto, será en la intimidad y sin periodistas que puedan poner la oreja a ver qué dicen los presentes: es como las cenas de la Asociación de Fiscales pero sin Feijóo, que al Palacio de Buckingham no está invitado por muy jefe de la oposición que sea. Ah, ¡y Bolaños tampoco! ¡Bolaños tampoco está invitado! No se venga arriba el ministro de la Presidencia y para paliar el trago del dos de mayo se haga pasar por acompañante de la reina Letizia. ¡Quieto, Félix!
No se venga arriba el ministro de la Presidencia y para paliar el trago del dos de mayo se haga pasar por acompañante de la reina Letizia. ¡Quieto, Félix!
La reina no tiene más acompañante que el rey, que se va a hacer hoy un Madrid-Londres con escala en Lugo. Dices: ¿es un vuelo low cost? No, es la agenda de un monarca. Primero en Lugo para presidir un acto de la Fundación Princesa de Girona, luego en Londres para la cena de Charles, tempranito en pie por la mañana, él y la reina, para ser trasladados hasta la Abadía (no sé si en la lanzadera ésa que les pusieron para el funeral de the queen) y terminada la ceremonia, de Londres a Sevilla para entregar la Copa.
Al lado de la agenda de un rey, cualquier otra palidece. Si acaso empata la de Yolanda Díaz cuando España está en campaña.
La agenda mitinera de la vicepresidenta segunda
Hoy se da a conocer la agenda mitinera de la vicepresidenta segunda (marca). Hay más expectación que con los sorteos de la Champions. A ver cómo quedan los emparejamientos: o sea, si se empareja sólo con los candidatos afines a esta cosa, Sumar, o concede algún minuto basura a los candidatos de Podemos.
Al lado de la agenda de un rey, cualquier otra palidece. Si acaso empata la de Yolanda Díaz cuando España está en campaña
Porque el fin de semana, para aquellos de ustedes que no estén interesados ni en coronaciones ni en fútbol, ofrece este otro aliciente imbatible que es disfrutar de un buen mítin. O de varios. Con sus himnos, sus carteles, sus matracas, sus chistes sobre el adversario, sus exageraciones, sus distorsiones sobre el adversario, sus euforias falsas -vamos a ganar, vamos a ganar-, su moral a la tropa y su acabóse y no quedó nada.
Resumen adelantado del fin de semana mitinero
Porque de los mítines lo que queda es esa cosa etérea que se llama estado de ánimo de la parroquia propia. Eso, y dos frases prefabricadas en boca de los oficiantes. Feijóo, por ejemplo, ¿qué cree usted que dirá ese fin de semana? Eso es. ¿Y Sánchez, qué dirá Sánchez? Gracias, presidente. Pues hasta aquí el resumen, adelantado, del fin de semana mitinero.
Es posible que el PP quiera darle un poco de aire a esto de la Comisión Europea pidiendo penas más altas para los condenados por corrupción -a diferencia de Sánchez, que rebajó las penas para la malversación de políticos de Esquerra-. Pero ya ha pasado recado la Moncloa a los portavoces socialistas de qué es lo que toca decir si sale el tema. Usted, vicepresidenta Calviño, ¿qué diría sobre la propuesta europea? ¿Y usted, presidente, qué dice?
Por alguna razón, todo el mundo ha interpretado la propuesta de la Comisión en sentido contrario a la autoelogiosa interpretación del Gobierno
Qué extraordinario grado de sintonía. Cómo se nota que llevan cinco años trabajando y predicando juntos. Los deberes hechos. Porque introdujeron a última hora, para que no pareciera que abarataban toda la corrupción, esto de que el cargo público que incremente mucho su patrimonio y no pueda justificar el origen sea reo de enriquecimiento ilícito. Los deberes hechos.
Título de El País ayer: ‘Bruselas obligará a endurecer las penas por malversación y forzará a España a reformar la rebaja -rebaja- aprobada recientemente’. Por alguna razón, todo el mundo ha interpretado la propuesta de la Comisión en sentido contrario a la autoelogiosa interpretación del Gobierno.
Sigue coleando la tangana
Dijo el presidente ayer esta frase que hay que esculpir (o esculpirle) en mármol: "Siempre respetar las reglas, porque si no se respetan las reglas, quien no las respeta, pierde toda la razón".
Dices: ¿estaba hablando de la sanción a su portavoz Isabel Rodríguez por abusar de su posición en la sala de prensa de Moncloa haciendo mítines contra Feijóo? No, estaba hablando del dos de mayo en Madrid.
Por respetar las reglas se refiere a que Ayuso deje subir a la tribuna de autoridades a Bolaños, no a que Bolaños se abstenga de ir si no ha sido personalísimamente invitado. Quién nos iba a decir que llegaríamos al final de la semana con esta tangana aún coleando.