Esta tarde, a las tres, tenemos a la selección española de baloncesto en el Mundial de China, que se enfrenta a Polonia en cuartos de final. Son mejores los nuestros, eso es así, pero se juegan el pase a las semifinales de un Mundial, y ahí se sacan fuerzas de flaqueza porque son momentos especiales. La selección comenzó el Mundial dejando dudas, con partidos frente a selecciones inferiores, que se le complicaban, pero es cierto que ha ganado todos, y el domingo fue espectacular como jugó y ganaron a Serbia. Si mantienen la concentración, lo normal es que ganen esta tarde a Polonia, y el viernes jugarán las semifinales contra Australia o la República Checa. Las dos mejores selecciones europeas obtienen también la clasificación directa para los Juegos Olímpicos del 2020 en Tokio. Es decir, que hay demasiadas cosas en juego esta tarde como para relajarse.
Y hoy tenemos día de descanso en la Vuelta ciclista a España, que entra en sus últimas cuatro etapas de competición, porque el domingo es un día en que los ciclistas ya aceptan al ganador, y desfilan por los pueblos de Madrid hasta llegar al circuito de la castellana para disfrutar del sprint. Roglic, el esloveno, ayer volvió a responder al ataque del colombiano Miguel Ángel López y el también esloveno Pogachar, pero perdió unos segundos Valverde. Parece que se disputan más el segundo y el tercer puesto que no el primero, pero ayer tampoco le vi tan redondo a Roglic, aunque es posible que tampoco él quisiera hacer alardes porque no lo necesita. Está siendo el mejor, y estoy convencido que va a ser uno de los mejores de los próximos años. Una vez se vea ganador de la vuelta habrá nacido una estrella en el ciclismo. Primo Roglic, el esloveno que quería ser campeón de saltos de esquí, y lo fue de ciclismo.